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En esta licitación está contemplada la provisión de la infraestructura necesaria para la ejecución de actividades propias de las terminales y otros servicios complementarios que el oferente proponga hasta la finalización del actual período de gobierno.

Pígola realizó esta mañana una recorrida por las terminales con los nuevos concesionarios y dijo que la idea es que las terminales “sigan una continua mejora”.

Agregó que el gobierno departamental pretende “darle a los usuarios un servicio acorde a las necesidades”. Estacó que se han hecho mejoras en baños, estacionamientos y se ha sumado el servicio de limpieza y vigilancia. “Son cosas que esperamos que, con esta gestión privada, continúen haciéndose”, apuntó.

También explicó que, como ya se había hecho una inversión, se optó por la empresa que ofrecía “un canon medianamente alto y una relación de obra que contemplara las necesidades. La idea es tratar de recuperar un poco lo que se invirtió”.

El jerarca manifestó que la IDM “ha iniciado el proceso de desalojo” a los ocupantes de los locales, aunque “la gente que está dentro de las terminales tiene la posibilidad de negociar su mantenimiento. Y se levantarán los procesos de desalojo, aunque la Intendencia pretende resarcirse por el endeudamiento anterior”.

Indicó que la tasa de embarque se le cobra a cada pasajero “es para compensar de alguna manera, el ‘toque’ de andén que realiza cada ómnibus que opera en la terminal. Las empresas tienen que aportar para el mantenimiento de las terminales. Hubo un tema de administración y no hubo para mantenerlas y tuvo que tomarlas la Intendencia”.

Expresó que también existen deudas de las terminales “y creo incluso no se ha logrado encontrar toda la información que necesitamos para tener una cabal realidad del endeudamiento”.

Dijo que se va exigir que se va a exigir el pago de las deudas, al menos desde que la IDM tomó la administración. Consideró que todo el proceso de normalización del funcionamiento de las terminales con los nuevos concesionarios “nos llevará unos 180 días, según estimo yo”. Pero aclaró que a partir de ahora la gestión va a seguir siendo controlada por la IDM, que determinará la aplicación de multas y hasta la rescisión del contrato si hay incumplimientos.

Informó que la tasa de embarque hay que revisarla, “porque está marcada por un decreto bastante viejo, que tiene como 15 años. Pero siempre va a tener una relación con el boleto que se paga a destino y siempre va a tener el valor de tasa como la que está implementada en la Terminal de tres Cruces, en Montevideo”.