Martín Etcheverry, representante del hombre fallecido en el Hospital de Maldonado, se refirió al tema este miércoles en la Primera Página de la Revista de FM Gente. Indicó que manejan la posibilidad de que exista otro video relacionado al hecho y que, actualmente, se encuentra en la etapa investigativa. Según el abogado, la versión policial no coincide con la de los testigos.
El tema estará a cargo de la Fiscalía de 4º turno y este viernes será la presentación de la causa. “Me preocupan algunas cosas como, por ejemplo, que el cuerpo se va a cremar (…) puede haber ahí elementos que desaparezcan”, advirtió.
El hecho ocurrió el pasado 15 de junio sobre la hora 22:50 cuando una mujer denunció al servicio de emergencia 911 que, en una vivienda de Cerro Pelado, había un desconocido pidiendo auxilio. El hombre fue trasladado en un móvil policial, y según la Policía, en el trayecto se descompensó. Fue ingresado al Hospital de Maldonado donde una más tarde murió. Entre su ropa fueron encontrados envoltorios con sustancia blanca.
Consultado sobre si el hombre sufrió algún tipo golpes o lesiones previo a su ingreso al móvil policial, el abogado indicó que en el video se visualiza parte del operativo ya que fue grabado por un menor de edad que bajó el celular para que la Policía no se percatara. “Se ve un policía de particular que lo detiene, que lo controla porque lo agarra de atrás, lo hace acostar al piso y llegan otros funcionarios policiales y, con el hombre en el piso totalmente controlado, ahí se ve que uno de ellos le da un golpe pareciera que en la cabeza”, relató. El video fue tomado a unos 50 metros de distancia y se siente el ruido del golpe que, según Etcheverry “no fue insignificante”.
Seguidamente, arribó al lugar una moto policial; testigos aseguran que el birrodado pasó por encima uno de los pies del hombre y que, cuando fue subido al móvil policial el hombre “aparentemente ya iba con la cabeza totalmente floja y las piernas flojas, como que ya estaba inconsciente en ese momento”, destacó.
Etcheverry manifestó que se trató de un procedimiento policial incorrecto y de un golpe totalmente innecesario. Según un testigo, la Policía le decía “rastrillo” y él respondía “no, ayuda”. Al momento de su traslado al centro de salud, el hombre no contaba con la cédula de identidad por lo que no pudo ser identificado. Tenía 40 años y era adicto a las drogas.