El empresario Javier Moya fue absuelto por un Tribunal de Apelaciones, tras probar que una menor con la que mantuvo sexo a cambio de dinero le mintió la edad. Según consigna este viernes El País, los ministros revocaron el fallo judicial y el imputado quedó en libertad porque entienden que fue inducido a “un error de derecho”.
Moya había sido procesado el 30 de diciembre pasado por un delito de explotación sexual comercial de una adolescente de 15 años de edad. Estuvo recluido en la cárcel de Campanero (Minas) hasta el miércoles pasado, cuando dos de los tres ministros del Tribunal de Apelaciones de 2º Turno revocaron el fallo del juez Javier Gandini.
Según fuentes de El País, los ministros José Balcaldi y William Corujo concluyeron que se incurrió en un "error de derecho", ya que si bien Moya mantuvo relaciones sexuales con una menor de 15 años, la adolescente le dijo que tenía 18. El ministro Daniel Tapié no estuvo de acuerdo con tal tesitura y votó en contra.
Durante estos meses Moya estuvo recluido en Campanero en “condiciones severas”, aseguró a El País el abogado Leonardo Guzmán. Hasta ayer, el defensor no conocía los argumentos del fallo del Tribunal de Apelaciones Penal de 2° Turno, pero señaló que se trata de un caso "muy singular".
El empresario de 75 años había sido procesado junto a otros dos imputados, de 40 y 58 años de edad, por el mismo delito de explotación sexual comercial de menores de edad. Sin embargo, estos dos no apelaron sus procesamientos.
Recuerda El País que "la investigación judicial probó que los procesados de 40 y 58 años habían montado una red que reclutaba adolescentes que accedían a tener relaciones sexuales con hombres a cambio de recargas de celulares, cenas, estadías en La Barra de Maldonado, paseos por Punta del Este, championes, otras vestimentas y hasta $ 400".