El intendente de Cerro Largo Sergio Botana dijo que el “cero alcohol” es de mentes intolerantes, que hay que limitar a los que andan rápido y hacen maniobras imprudentes y que en su pueblo (Melo) la intendencia no se hace “ver” dejando autos medio año frente a la comisaría.
En diálogo con Fm Gente en Argentina, Botana sostuvo que “la tolerancia cero es producto de mentes intolerantes, con cero vida.
El que propone una cosa de ese tipo es que vive poco y no le gusta dejar vivir”, opinó.
Para Botana lo que hay que combatir son los abusos de los que andan rápido y hacen maniobras imprudentes.
La percepción
“Que no se pueda celebrar los 80 años de la vieja, los 50 de un matrimonio o compartir juntos los amigos, me parece de poco sentido común y que se percibe a la gente sensata como si fueran delincuentes
¿Por qué no se preocupan de agarrar a los que tienen que agarrar?, se preguntó.
“No pueden atender lo que deben, porque hacen estas pavadas”, se contestó.
El intendente reconoció que le gustó que Lacalle (Pou) siguiera su propuesta.
“A los otros no los entiendo, ¿cuál es el avance que la familia no se pueda reunir y compartir?.
Botana fue claro en señalar que “en mi pueblo si la gente anda despacio no lo vamos a molestar para hacernos los “lucidos” y dejarle el auto seis ú ocho meses en la puerta de la comisaría, y la moto más tiempo, porque se la vamos a sacar.
No es fundamentalista
“No controlo el casco y no tengo rapiñas en la planta urbana de mi pueblo”, precisó el intendente.
“¿Sabe cuántos muertos tengo en la planta urbana de mi pueblo…? ninguno. En Río Branco donde se controla el uso del casco, tengo dos”.
Para el jerarca comunal “hay que controlar al abusador. Las reglas de tránsito son de convivencia.
Después que un fundamentalista de estos dice algo hay que seguirlo, como si fueran religiosos y cuando se cuestiona el sistema, se recibe todo tipo de condena.
Pero el tiempo va dando la razón”, concluyó.