El juez federal Julián Ercolini ordenó operativos en inmuebles vinculados con Héctor Martínez Sosa, Alberto Pagliano y Pablo Torres García.
Por las sospechas de irregularidades en la contratación de seguros dentro del Estado durante la administración del Frente de Todos, el juez federal Julián Ercolini allanó esta noche casas y oficinas del broker Héctor Martínez Sosa, allegado al expresidente Alberto Fernández; de Alberto Pagliano, extitular de Nación Seguros, y de Pablo Torres García.
Los tres están siendo investigados como parte de una presunta maniobra relacionada con dependencias del Estado que estaban obligadas a contratar sus pólizas con Nación Seguros y lo hicieron, en negocios millonarios que se investigan, mediante un broker, Martínez Sosa, cuya esposa es María Cantero, secretaria del exprimer mandatario; también intervinieron el empresario Torres García y Alberto Pagliano, que además de haber sido titular de Nación Seguros era amigo de la juventud de Alberto Fernández, que en sus inicios en la política se desempeñó en la Superintendencia de Seguros.
Ercolini mandó a la Policía Federal a secuestrar documentación relacionada con esta investigación. Los allanamientos se realizaron este lunes por la noche en las casas y oficinas de los empresarios y del exfuncionario en la zona norte del Gran Buenos Aires y en la Capital Federal, dijeron a LA NACION fuentes del caso. “No hay órdenes de detención”, dijeron las fuentes.
Tal como informó LA NACION, Martínez Sosa se convirtió en el productor de seguros más importante del país. El vínculo con el expresidente se remonta a décadas atrás. A tal punto que Martínez Sosa le hizo un préstamo de US$20.000 en 2008, cuando Fernández renunció como jefe de Gabinete y requería pagar unas deudas. Ese crédito persiste.
De acuerdo con los datos que publica Poder Ciudadano, Alberto Fernández recibió a Martínez Sosa en Olivos el 8 de enero de 2020. El millonario productor ingresó a las 21.36 y se retiró a la 1.20 de la madrugada de la quinta presidencial. En los mismos horarios figuran también los ingresos de Guillermo Alonso, el segundo de Martínez Sosa en la empresa, y de María Guadalupe Cortés, productora de seguros. Además, estuvo en aquella cena Fernando Salim, también integrante del sistema que orbita alrededor de Martínez Sosa. El 11 de mayo de 2020 y el 14 de mayo de ese mismo año, en la etapa más dura de la cuarentena, aparecen dos ingresos más. En esas ocasiones Martínez Sosa estuvo acompañado por Cantero, su esposa y secretaria privada de Fernández.
Además, el Gobierno anunció que el ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, denunció a parte del gabinete de Alberto Fernández por un fraude similar en la Anses. “Esto en referencia en las irregularidades detectadas en virtud de los seguros y préstamos que se otorgaban a los jubilados”, destacó.
“El ministerio de Capital Humano presentó una denuncia contra los responsables de la anterior gestión de Anses por los siguientes cargos: fraude a la administración pública, abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público, negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función público, tráfico de influencias y malversaciones de caudales de caudales públicos”, informó Adorni en su habitual conferencia de prensa. Y siguió: “Esto gira en torno a la política de austeridad y transparencia que se ha anunciado para toda la administración pública”.
Este lunes, el extitular de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), Osvaldo Giordano, se refirió al caso, y dio detalles del manejo de contrataciones.
“Anses da créditos a los jubilados, y siempre está la posibilidad de que el jubilado fallezca y ese crédito no se pueda cobrar. Ante eso, hay dos alternativas: cobrarles a todos los tomadores de créditos un pequeño porcentaje, hacer un fondo y cubrir las pérdidas; o contratar un seguro de manera directa”, explicó.
Durante la gestión de Fernández -advirtió Giordano- se cambió de un esquema de fondo a un sistema de pólizas a través de un decreto presidencial. “Cuando asumimos fue abrumador la cantidad de problemas; frente a eso definimos qué contrataciones seguir y cuáles no. Ahí aparece el tema de los seguros, cuyo criterio se cambió durante el gobierno de Alberto Fernández”, repasó.
Y detalló: “La prórroga con Nación Seguro vencía en febrero y había que tomar la decisión de renovar o no. Pedí una comparación entre el costo de volver al esquema anterior de autoseguro, y ahí descubrimos que nos costaba un 40% menos, que era más eficiente. La diferencia era de cientos de miles de pesos, porque con el autoseguro nos ahorrábamos un montón de cosas”.