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Alonso recordó que hoy, en nuestro país, la edad de jubilación es a los 60 años, con 30 años de trabajo, de aportes. “Pero, promedialmente, la edad a la que se jubilan los uruguayos es a los 63 años… Cuando hablo de correrla, hablo de correrla de 63 a 65, promedialmente, que no es lo mismo que correrla de 63 a 65”.

Dijo que este planteo responde, entre otras cosas, a que le preocupan los casi 160 mil jubilados “que hoy cobran jubilaciones de hambre, de 11 mil pesos”. Agregó que “este es un tema que tenemos que solucionar. Y no alcanza con los 288 pesos, a los 300, que les han dado por otro lado”.

Destacó que los números “podrían dar si asumimos la responsabilidad de modificar el sistema de seguridad social. Porque todos hablan y todos están de acuerdo, pero debajo de la mesa: ninguno se anima a decirlo”. Añadió que, si no se expresa, “terminamos siendo unos irresponsables que siguen aumentando esa caja por la relación que tenemos en el país entre activos y pasivos, con una población envejecida. Y el sistema va a colapsar”, advirtió.

La legisladora señaló que, entre otros han hablado el presidente Tabaré Vázquez y el ministro Danilo Astori. “Y todos dicen que el próximo gobierno va a tener que hacerse cargo de este tema… Vamos pasando de cinco años en cinco años y tenemos jubilados que ganan lo que acabo de decir, una cada del BPS que está ‘en rojo’… Estamos hablando de 600 millones de dólares”, que tiene que cubrir el Estado, porque no le alcanza con todos los aportes que recibe, incluyendo los 7 puntos del IVA.

Subrayó que los especialistas recomiendan cambiar el rumbo, aunque señaló que, para hacerlo, “no se puede hacer de un día para el otro”, porque el sistema de seguridad social “es una especie de transatlántico y lleva su tiempo” modificar su derrotero. “Pero lo tenemos que hacer. Porque si no, cuando un ve, la roca la tenemos a 100 metros y te vas a estrellar. Por ese camino va”, afirmó.

La parlamentaria indicó que se deberían generar incentivos en la tasa de reemplazo, para que quienes se van a jubilar opten por retirarse a una edad más avanzada, lo que significa que va a cobra más jubilándose a los 63 que a los 60 años, explicó. Indicó que “la expectora de vida en el país cambio. En Uruguay las mujeres viven el promedio hasta los 80 años y los 75 aproximadamente”, remarcó.

“Por supuesto que no es la única solución. Pero habría que ir acompasando la jubilación con esa expectativa de vida… No tiene que ser de manera obligada. Por eso hablo esto de los incentivos. Pero sí tiene que haber mecanismos que ayuden a que el país pueda sanear sus cuentas”, apuntó.