Tanto el mensaje de voz en la contestadota de Casaretto como los mensajes de texto al celular de Magdalena Zumarán son analizados por las autoridades policiales que decidieron custodiar la casa del diputado nacionalista.
En el caso de los mensajes de texto a la edila Zumarán se espera que la empresa telefónica aporte los datos solicitados por la policía para continuar con la investigación.
Mientras tanto en el caso de las amenazas en la contestadora del diputado Casaretto, el hecho se transforma en más complejo ya que no se tendría el numero desde el cual se llamó a la casa del legislador.