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Tiempo atrás, un cronista de FM GENTE, recorrió el lugar y consultó a vecinos. Los pocos que existen en la zona señalaron que tenían "oídas" que en ese sitio había ocurrido hace más de 30 años un triple crimen.

Todos coincidieron en que nunca han visto a nadie en el lugar aunque el pasto se ha cortado pero la estructura de material, de dos dormitorios, entre otros ambientes, permanece en aparente abandono.

LOS HECHOS

El 14 de setiembre de 1987 el chalet "Alos" fue el escenario de este triple crimen. Las víctimas fueron el francés Roberto de Olano, su hija Ana Inés y el novio de ésta, Luis Martínez, cuyos cuerpos fueron encontrados días después en avanzado estado de descomposición. De Olano estaba en su dormitorio y su hija y el novio en otro. La ejecución fue realizada mientras dormían, según las pericias.

De acuerdo a la información policial de la época, el asesino utilizó una pistola 6.35 con la que efectuó seis disparos.

Desde un primer momento se identificó a Marcelo Franca Paz de 20 años como el sicario que ejecutó a las tres personas. El joven asesino huyó en el auto del propio De Olano, un Volkswagen Amazón último modelo rumbo a la frontera uruguayo-brasileña, concretamente a Rivera.

Si bien la frontera estaba cerrada, el sospechoso logró pasar hacia Brasil y se refugió en Bagé. Antes de cruzar la línea divisoria entre ambos países quemó el auto en la falda del monte Caqueiro.

Dos altos jerarcas en aquel entonces de la policía de Maldonado lo fueron a buscar a Bagé. En una misión que generó polémica, los dos preparados funcionarios se arriesgaron en una misión que revestía un secreto total pero no pudieron detener a Franca Paz.

Un equipo periodístico de EL PAIS encabezado por el experiente cronista policial de entonces, Carlos Lemos, lo ubicó al sospechoso a 300 kilómetros de Porto Alegre, protegido por dos decenas de narcotraficantes. “Soy inocente, no maté a nadie”, se limitó a decir.

Los últimos datos que se conocen sobre su paradero hablan que sigue caminando libremente por las calles de esa ciudad brasielña, dado que la justicia brasileña no extradita a connacionales.

Diversas hipótesis se han manejado sobre las causas que llevaron al triple homicidio. Ninguna tuvo un fuerte asidero en los investigadores pero tampoco lograron avanzar y reunir indicios sobre las causas.

El caso ha caído en el olvido prácticamente y tras aquella misión fracasada de la policía de Maldonado nunca más se logró avanzar en el esclarecimiento del caso, del cual este mes se cumplen 36 años de ocurrido.

Cabe agregar que esta propiedad ubicada en una estrecha y corta calle de la parada 9 de la mansa, habría quedado a cargo de una parienta del asesinado Roberto De Olano, la cual residía en el Perú, según los últimos datos que se disponían. Aunque otras versiones indican que el bien fue rematado años atrás. La finca fue refaccionada y hoy muestra un aspecto muy diferente y moderno.