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El abogado del empresario, Fernado Urquhart, señaló que en 2008 la jerarca mandó cerrar "arbitrariamente" el local que su cliente en el Punta Shooping. También sostiene que existió adulteración de documento público porque se corrigió una firma en el expediente administrativo. A esto adosa un posible “abuso generérico de funciones en razón de que habilitó el local pero se prohíbe la venta de determinados artículos”.
El abogado enfatizó que esto ocurrió “en plena zafra, cuestión de causar el mayor perjuicio económico”, debido a "un encono personal" de la directora hacia su cliente. Por ese motivo entiende que ahora, el juez Gabriel Ohanian deberá establecer si la jerarca incurrió en abuso innominado de funciones y falsificación de documento por funcionario público, como supone su cliente.

“DE ACUERDO A LAS NORMAS”
Más tarde fue consultada la directora Araújo, quien ratificó que el municipio actuó de acuerdo a la normativa vigente y subrayó que el empresario “no entiende” que está prohibido vender fuegos artificiales en altura. Aseguró que tanto los inspectores como la dirección actuaron de acuerdo a la normativa vigente.
También informó que la IMM denunció al empresario por desacato, ya que abrió su local y siguió vendiendo fuegos artificiales sin permiso y desoyendo a las diversas reparticiones que le advirtieron al respecto. En ese sentido, dijo que en la audiencia aportó una “vasta documentación” sobre los expedientes abiertos en la intendencia a raíz de los enfrentamientos con este empresario por la venta de fuegos artificiales, desde el año 2005.