Con un llamado a la unidad sindical entre trabajadores públicos y privados, reclamos por vivienda, salud, educación y condiciones laborales, se cumplió este mediodía en Maldonado la adhesión al paro parcial convocado por el PIT-CNT. El dirigente del SUNCA, Pedro Arismendi, exigió el fin de la persecución sindical y una política de vivienda con participación de los trabajadores.
Columnas de centenares de trabajadores se concentraron en la Plaza San Fernando de Maldonado, para reclamar trabajo digno, más negociación colectiva, salud, educación y vivienda para todos. Sobre el estrado instalado en la equina de Florida y Sarandí, una decena de dirigentes sindicales habló para unos trescientos trabajadores, en su mayoría obreros de la construcción. No obstante, también fueron notorias las banderas del sindicato de Funcionarios del Conrad y de los trabajadores de la Salud Privada, entre otros.
El dirigente bancario Gabriel Rius instó a los trabajadores a unirse, interiorizarse en sus derechos, capacitarse y reclamar cuando no se cumplan dignas condiciones laborales. “Queda mucho para avanzar a nivel de públicos y privados. Tenemos familiares que trabajan en diferentes áreas, como el comercio y los edificios, sin derecho a descanso y en condiciones que debemos revertir”, dijo a modo de ejemplo.
También se refirió a dirigentes sindicales que asumirán como jerarcas en el segundo gobierno departamental del Frente Amplio, a la hora de elaborar el presupuesto departamental. “Hay que llamarles la atención para que no se utilice la tercerización como una forma explotación del Estado quede encubierta a través de un tercero”, ejemplificó Rius.
También para el ámbito municipal, pidió a la administración que se preocupe por las condiciones en que viajan los trabajadores. “Que lo hagan en condiciones dignas, no como hasta ahora que lo hacen en colectivos lo hagan en condiciones dignas, no como ahora, no teniendo otro recurso que gastar en la moto”.
Reclamó, asimismo, guarderías en los barrios. “No puede ser que alguien que tiene que irse a trabajar ande mendigando con un familiar o con un vecino para dejar a sus gurises. Tiene que haber guarderías con horario extendido”. Asimismo, pidió que la IMM promueva lugares de estudio y facilite el acceso con locomoción, que colabore y “que negociemos en la capacitación de los trabajadores, habilitaciones de los lugares de trabajo, etcétera”
En cuanto a la discusión en los Consejos de Salarios, pidió a los trabajadores locales “tener bien claro” qué es lo que se quiere tratar. “Que se arrime el compañero que todavía no se animó, para crecer como movimiento sindical y como intersindical, para conseguir cada vez una movilización más grande”, arengó, seguido de aplausos.
MEJOR SISTEMA DE SALUD
Por su parte la dirigente de los funcionarios de la Salud Privada, Rosana Hernández, repasó la plataforma del sector pero también reclamó la profundización de la Reforma de la Salud para que los usuarios tengan el mismo servicio a nivel público y privado.
Abogó por el trabajo sindical para mejorar la calidad del trabajo del personal de la salud y de la salud de los usuarios, acortar la espera para las consultas, bajar el costo de medicamentos, órdenes y tiques, entre otros puntos.
MÁS VIVIENDA ENTRE TODOS
El dirigente de la construcción, Pedro Arismendi, recibió un cerrado aplauso del público cuando llamó a la unión de todos, tanto públicos como privados. También advirtió a las empresas que se terminó el tiempo del “manoseo” de funcionarios y de los despidos en represalias por su sindicalización.
Agregó, en otro punto de su discurso, que con esta movilización, a la que seguirán otras, los sindicatos echan por tierra las acusaciones de algunos que les tildaron de que estaban casados con el gobierno y amarillos. “No estamos amarillos, estamos unidos y fortalecidos y les vamos a dar combate”, aseguró
El dirigente enfatizó, además, la necesidad de viviendas para todos los trabajadores que no cuentan con ella, como prioridad de la lucha sindical a nivel nacional. Antes mencionó la educación y la salud como pilares fundamentales para la riqueza del país.
“Parece que por suerte este gobierno va a enmarcar la bandera de llevar adelante, de clavarle el diente al techo de cientos de miles de uruguayos que viven en asentamientos”, dijo. En ese sentido, enfatizó que el movimiento sindical aportará todo su conocimiento para colaborar en esta causa.
Cuestionó, además, la intención de las patronales de apoyarse en las resoluciones de la OIT en cuanto a la ley de libertades sindiciales. “Está bien, cuando se les toca el bolsillo van a la OIT. ¿Pero por qué no lo hicieron en 2002 para decir que en este país había millones de pobres?”, desafió.
Concluyó que “rompe las tripas” cuando un trabajador cobra $ 4.000 y sale a pagar una pieza de techo de chapa y baño compartido.
"Sabemos lo que es atravesar una quincena dura para terminar de pagar un alquiler que si no lo pagás te vas. Ahora hay que reafirmar el tema de vivienda entre todos.
En este tema, “los públicos y los privados somos trabajadores igual y cuando dejamos la corbata o el zapato amarillo a las seis de la tarde tenemos las mismas necesidades”.