Washington Villafán, vocero de los asentados en Nueva Esperanza, acusó a las autoridades de la Intendencia de Maldonado de “reprimir” con policías "armados con escopetas" durante los procedimientos de desalojo en ese predio ubicado junto a la ex – Cylsa. En tanto, fuentes comunales explicaron a FM Gente las características de los procedimientos y afirmaron que la Policía sólo interviene en caso de desacato de los desalojados.
Washington Villafán aseguró que en el barrio Nueva Esperanza hay “familias con niños que están armadas” y que el área de Asentamientos de la Intendencia de Maldonado envía inspectores y “policías con escopetas a reprimir a la gente y a sacarlos”.
El vecino acusó a los funcionarios de “romper ranchos y hacer terribles destrozos”, con respaldo de la Policía y responsabilizó de ello a la directora de Asentamientos de la IDM, Cristina Acuña.
Villafán reconoció, asimismo, que tuvo altercados con los efectivos policiales "para defender a la gente que es reprimida y que “recurre a los terrenos municipales para no vivir en la calle”. A su juicio, las familias “tienen derecho” a ocupar esos predios públicos porque “son de todos”.
Fuentes comunales afirmaron a FM Gente que estos procedimientos se realizan cuando se detecta que se comienzan a construir una vivienda. Explicaron que en primera instancia se enviaba a funcionarios municipales para derrumbar "el rancho" en construcción pero, a raíz de los insultos y golpes que los vecinos han propinado a los trabajadores, se resolvió recurrir a la Policía para respaldarlos.
"Los efectivos van en ánimo pacífico y sólo intervienen en ocasiones, cuando los asentados insultan, escupen y lanzan objetos contra los funcionarios municipales que proceden a demoler la vivienda en construcción", afirmaron. Señalaron que esto ocurre tanto en el barrio Nueva Esperanza como en otros asentamientos, cuyo crecimiento procura impedir la comuna.
Agregaron que jamás se interviene cuando la vivienda ya está construida. En tales casos, la IDM radica denuncias penales e inicia procedimientos de desalojo que, por estos días, rondan los 160. Varios se encuentran en el asentamiento Nuevo Esperanza.
(foto de archivo - untechoparamipais)