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Sanjurjo se reunió con los vecinos de Maldonado, quienes le expresaron la preocupación por la conversión de la cárcel de Las Rosas en un centro penitenciario de carácter regional.

“La conversión de la cárcel hace que haya más gente que viene de otros departamentos y después termine quedándose”.

Asimismo, el jerarca del Ministerio del Interior aseguró que este gobierno ha sido el primero en bajar todos los delitos en términos generales: las rapiñas en un 40%, el abigeato en un 60% y el hurto en un 20%.

“El homicidio es el delito que todavía nos frustra porque no hemos logrado bajarlo a niveles significativos”.

Por otra parte, Sanjurjo afirmó que un enfoque dual que abarque tanto lo represivo como lo preventivo, es el camino para lograr un cambio en materia de seguridad.

“En los países seguros, hace 50 años que se entendió que una política de seguridad moderna tiene que tener toda la represión posible (…) pero si no tratas las adicciones y no logras que las personas que van presas salgan mejor de lo que entraron y puedan conseguir un laburo, no sirve para nada”.

En esa misma línea remarcó que el fortalecimiento del aparato represivo que se ha realizado a nivel nacional ha conllevado a un aumento de la
población en situación de calle.

“Cada año de estos últimos cinco años tenemos 1000 presos más de los que teníamos el año anterior (…) estamos construyendo tres cárceles nuevas que cuando se inauguren ya habrá superpoblación carcelaria de nuevo”.

Con respecto a su actual rol como asesor del Ministerio del Interior, Sanjurjo subrayó el desarrollo en materia de represión, pero lamentó que “la pata preventiva, aún está en pañales”.

“Transformar el sistema penitenciario va a llevar décadas (…) tenemos que lograr que el preso se levante a las seis de la mañana, limpie la celda, desayune, esté ocupado en ámbitos educativos, aprendiendo a laburar y laburando hasta que llegue de noche cansado y se vaya a acostar”.

En relación a la declaración de una emergencia nacional, en materia de seguridad, el jerarca remarcó que se trataría de una acción de carácter meramente simbólico.

“Decretar una emergencia es un tema simbólico y sirve de poco (…) lo hizo Vázquez (Tabaré) en el año 2019 cuando decretó la emergencia nacional en materia de violencia basada en género. ¿Alguien se acuerda de eso?, ¿alguien sabe que sigue vigente la emergencia?”.

Finalmente, Sanjurjo se mostró a favor de los allanamientos nocturnos y lamentó la falta de seguridad en ciertos puntos del país.

“Acá hay zonas que son muy seguras pero otras que no, y yo tengo que pensar en todos los uruguayos”, sentenció.