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El sistema implica la instalación de 19 cámaras en el centro de Maldonado y tres cámaras en Piriápolis. Se registrarán 24 horas lo que sucede en algunos cruces en particular. “La cámara registra una imagen de video y detecta automáticamente infracciones como el exceso de velocidad y cruce con semáforo en rojo, que quedan inmovilizadas como fotografías”, explicó Oleaurre.

Además, desde el centro de monitoreo los operadores tendrán la infracción en tiempo real y podrán enviar la orden a la cámara para que registre esa infracción en una foto. “Una moto sin matrícula, un camión con carga sin tapar, un conductor sin casco o circulando a contra mano, giros indebidos, todo podrá registrarse desde la computadora central”, destacó el funcionario.

Este mecanismo de vigilancia implica “un salto tecnológico hacia la necesidad de profundizar los controles de tránsito” y forma parte de un plan orientado a bajar los niveles de siniestralidad en el centro de Maldonado.

En esa zona, hace tres años se concentraba la cuarta parte de los siniestros departamentales aunque, según datos más recientes, en 2013 bajó al 20% y se espera que la tendencia descendente continúe este año. A esto hay que sumar bulevar Artigas tiene el 8% de los siniestros departamentales.

“Esencialmente tendremos un cúmulo muy grande información que, analizado por técnicos, permitirá tomar otras medidas complementarias. Por otra parte, esperamos que genere un gran sentido de prevención y corrija la sensación que tienen los conductores de que pueden hacer cualquier cosa”, estimó Oleaurre.

Recordó que Maldonado tiene el mayor índice de siniestralidad del país y el mayor índice de personas lisiadas por esta causa. Cada año mueren cerca de 50 personas, por lo cual el índice de mortalidad por cada 100 habitantes duplica el promedio nacional.

El sistema de vigilancia con cámaras fue diseñado por técnicos del departamento con apoyo de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII) y estará completamente operativo a fines de marzo.

Nicolás Pereira, responsable del equipo técnico, explicó que las instalaciones van por debajo del pavimento, por lo cual están a prueba de actos vandálicos y pasarán completamente desapercibidos. La mitad del sistema ya está funcionando.

Todo esto complementa otras medidas para abatir la siniestralidad, como los ensanches de veredas en ciertas esquinas, la instalación de nuevas baterías de semáforos, la regulación del estacionamiento en el centro de Maldonado y la restricción de la circulación de camiones que se implementa desde hace dos años y será profundizada, afirman las autoridades.