El 30% de los conductores que circulan por las calles del departamento en autos y motos, prácticamente uno de cada tres, no está habilitado para hacerlo, dijo el responsable de los Servicios de Salud de la Intendencia de Maldonado, Washington Ortega, en entrevista con FM Gente.
Ortega reveló que cuando se puso en marcha un convenio con el Hemocentro de Maldonado, por el que los donantes de sangre no pagan el trámite para obtener la libreta de conducir, esa gestión les permitió pararse delante de una realidad que intuían estaba allí, pero no habían comprobado.
“En Maldonado hay un margen (número) importantísimo de conductores que no tiene certificación y anda conduciendo”, preparó Ortega.
Agregó que “uno de los números importantes que nosotros pudimos descubrir cuando el convenio con Hemocentro, en los primeros tiempos, de los usuarios que fueron al cabo de un mes nos asombró ver algo que nosotros creíamos era verdad, pero no teníamos un muestreo claro” sobre ese tema.
“No me acuerdo bien, pero en aquel momento alrededor de un 40% o 50% de las personas que fueron a donar sangre hace años que circulaban en Maldonado y nunca habían tenido una certificación para poder conducir; no tenían libreta”, afirmó.
Prosiguió preguntándose cuántos circulan en el departamento de Maldonado hoy día sin libreta de conducir, y se respondió: “Tendríamos que calcular que debe de haber, en promedio, un 30% lo menos”. Ortega no aclaró específicamente cómo lograron reducir esa cifra.
Dijo que los servicios de Salud están atendiendo un promedio de 30 aspirantes a conductores por día, aunque habló de la posibilidad de llegar a 60 y, si contara con más personal podrían ser 90 aspirantes diarios, pero admitió que hay días que llegan 10.
AHORA SON MUY EXIGENTES
El funcionario afirmó que “nosotros de momento estamos siendo muy exigentes; cuando tenemos alguna duda, primero que nada, si médicamente la persona está apta, pero por la edad que tiene vemos los trastornos en la marcha que pueda tener, por su capacidad cognitiva, esa persona está totalmente excluida”.
“Hasta que no venga con los certificados y se compruebe que está en tratamiento, y que efectivamente el tratamiento le está dando resultado, no se está otorgando” la habilitación para que esa persona pueda conducir, explicó.
Ortega deslindó responsabilidad funcional, suya y del personal a su cargo, sobre la existencia de tantas personas que conducen en Maldonado sin estar habilitadas. “Lo mío es muy claro, lo mío es el examen médico y tratar de que la gente esté médicamente apta para poder conducir”, se defendió.
“Nosotros nos sentimos responsables del 50% de cada uno (de los conductores) que anda circulando en el departamento de Maldonado”, dijo. Afirmó que el otro 50% depende de la dirección de Tránsito, con todas las normas y requisitos que tengan allí.
MALDONADO MODELO NACIONAL
Las normas de certificación médica que aplica Maldonado para otorgar el registro de conducir ha sido tomado como modelo para extenderlo a todo el país en el marco de la licencia única nacional, cuya aplicación está en proceso.
“Trabajamos durante todo 2012 con los compañeros de las demás intendencias, donde se llegó a la definición de que dentro de pocos días, ya está todo armado, va a haber un examen único a nivel nacional” con idénticos requisitos en cualquier lugar del país donde se lo tramite, anticipó.
Consideró el nuevo sistema a punto de entrar en vigencia como “un logro que nosotros estamos tratando de efectivizar hace muchos años”. Indicó que por la Intendencia de Maldonado participaron en esa elaboración él mismo, Pablo de los Santos, asesor técnico de la dirección de los Servicios de Salud, y el licenciado en psicología Darwin Camblor, quienes “conocen muy bien lo que es la certificación médica para la libreta de conducir”. Dijo que se aplica el modelo de Maldonado porque es el más nuevo vigente en el país.
EL TRÁMITE AMATEUR
Ortega dijo que quien tramita el examen médico para obtener la libreta amateur de conductor, para autos y motos, entra por enfermería donde se le realizan controles de peso, estatura, presión arterial, se verá si la condición física del aspirante se encuadra en lo que definió como “parámetros normales que dice el nuevo protocolo de certificación”.
El segundo paso es pasar a la consulta médica donde se le hace un interrogatorio sobre enfermedades u otras afecciones de salud que haya tenido o padezca. Dijo que se hace bajo el formato de declaración jurada, lo que significa que se parte de la base de que el aspirante está diciendo la verdad.
Señaló que en caso de que alguien mienta y su participación en un siniestro de tránsito le lleva a pruebas forenses que comprueban que en el examen de aptitud física para obtener el registro de conductor mintió u ocultó información, deberá hacerse responsable, además, por las consecuencias de ello.
SE MUDAN
Ortega aprovechó para dar cuenta de que el área de servicios médicos que hoy funciona frente a la Intendencia, debajo de una tribuna del Campus, se mudará al local que era la policlínica del barrio Sarubi, en una operación triangular de la que interviene el Banco República.
El BROU financia una adecuación y construcción en el local que ocuparán los servicios médicos, se quedará con el local que estos ocupan, debajo de la tribuna del Campus, donde se abrirá una sucursal formal del banco, que sustituirá al mini local que tiene enfrente actualmente.
Indicó que los servicios de Salud de la Intendencia aspiran a que el nuevo trámite para obtener la licencia de conducir se inicie por la certificación médica, y una vez que se haya obtenido el visto bueno médico, que se otorguen 60 días para que el aspirante se presente en la Intendencia a completar el trámite con sus pruebas de aptitud técnica como conductor.
zl