El diputado nacionalista Federico Casaretto solicitó en la pasada sesión de la Cámara de Representantes, que los legisladores frenteamplistas, fundamentalmente los de Maldonado, se definan públicamente acerca del proyecto de ley sobre "Zonas Económicas Especiales" que enviara hace unos meses al Parlamento el Ministro de Economía y Finanzas Cr. Danilo Astori y que permitiría la instalación en Punta del Este de una "Ciudad de la Salud".
El legislador se refirió a que "hace unos días se ha conocido a través de la prensa, que varios legisladores frenteamplistas están preocupados por este proyecto del Ministro Astori. Algunos temen que exista una corrida de profesionales hacia este megaproyecto. Si es así, para eso está el Parlamento, para crear normas que prevengan estas cosas. Ahora bien, cuando aparecieron los colegios privados, las escuelas públicas no quedaron sin maestros. Cuando aparecieron los sanatorios privados, los hospitales públicos no quedaron sin médicos ni enfermeros. Es más, esta competencia hizo que se formaran más y mejores técnicos y profesionales".
"Se trata de un megaproyecto que se desarrollaría en Maldonado, en un área de 42 hectáreas, con una inversión estimada en U$S 200 millones y que daría trabajo a unas 7000 personas. Esto es muy bueno para el Uruguay y para Maldonado, que en las últimas décadas ha recibido a decenas de miles de compatriotas que buscan un futuro mejor, y que hoy pasa por una recesión, teniendo los asentamientos más grandes, los peores índices de inseguridad y la mayor tasa de seguros de paro del interior del país" señaló Casaretto.
Finalmente indicó que "lo que más nos preocupa son las posiciones de algunos sectores del Frente Amplio que históricamente se han opuesto a los beneficios tributarios a emprendimientos privados o extranjeros, simplemente por una cuestión ideológica. Son los mismos que se opusieron a que Uruguay firmara un TLC con EEUU, son los mismos que se opusieron al Hotel Conrad diciendo que traería prostitución y generaría vicios, son los mismos que se opusieron a avances tecnológicos como el Tomógrafo de Positrones (PET) o el robot Da Vinci para intervenciones quirúrgicas, sólo porque quienes los traían eran instituciones privadas antes que las públicas. Esperemos que esta vez no se impongan, como ha sido costumbre, ante la postura del Ministro Astori que inteligentemente apuesta a la radicación de inversiones como forma de acelerar una economía que está por demás enlentecida".