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“Paaaa… si así empezamos la temporada, lo que nos espera”, dijeron apenas despuntaba el alba del 22 de enero de 2008 los efectivos de Hurtos y Rapiñas de la seccional 1ª de Maldonado a cargo del comisario Jorge Guerra. Allí se había recibido una denuncia impactante: una familia había sido copada y secuestrada durante 8 horas por un solitario delincuente que, la retuvo toda la noche, recorrió algunos cajeros de la ciudad con las víctimas en busca de dinero, retornó a la casa, y luego de dormir, huyó sin provocarles lesiones. JMNR fue detenido rápidamente con el botín, y luego derivado a dependencias del INAU.
Pero en diciembre último, JMNR cometió (al menos que se sepa) su primer delito grave como mayor de edad, con 20 años, y por él fue a parar a la cárcel. La justicia le imputó un delito de rapiña agravada en concurso fuera de la reiteración, con un delito de lesiones graves intencionales. Su novia, MFG, resultó procesada sin prisión por encubrimiento y deberá cumplir arresto domiciliario por 90 días.
Pero, ¿Qué hizo JMNR en compañía de su novia?.
El miércoles 16 de diciembre, sobre mediodía, se movilizaba toda la Policía de Maldonado y Punta del Este, porque un obrero de la construcción de 25 años y que recién había cobrado el aguinaldo, había llegado moribundo a una ruta, desde un monte, presentando múltiples heridas, producto según declaró, del ataque de varios hombres que a bordo de un auto argentino, lo condujeron con su moto hasta una zona apartada de Camino Aparicio Saravia, entre la capital departamental y La Barra.
Apenas pudo recuperarse, declaró ante la Policía que había cobrado aproximadamente $ 16.000 en el BROU Maldonado, y luego se marchó en su moto Yumbo 125c.c. con destino a su casa.
Agregó que en las afueras de la ciudad de Maldonado al Este, fue sorpresivamente acorralado -aparentemente-, por un automóvil de color gris matriculado en la República Argentina, donde irían 4 individuos, 2 portando armas de fuego. Narró que cuando lograron detenerlo, uno de los sujetos bajó del coche para rápidamente treparse al asiento trasero de la moto, amenazándolo con “puntearlo” con un destornillador si no hacía lo que le indicaba. Según la versión de la víctima, fue así que lo obligaron a dirigirse hacia la avenida Aparicio Saravia, haciéndolo descender del bi rodado a mitad de camino para ingresar a un monte donde lo golpearon salvajemente hasta robarle el dinero recién cobrado.
Gravemente herido y como pudo, logró retornar hacia Aparicio Saravia para pedir ayuda, donde una meretriz que acertaba pasar por el lugar, lo encontró y dio rápido aviso a la policía. Desde ese momento se montó un importante operativo en busca de los peligrosos delincuentes que, según la única versión disponible, se desplazarían en el auto gris con vidrios polarizados y matriculado en Argentina.
La víctima fue operada de un importante corte en el cuello y otras lesiones hasta que fue dado de alta.

FUE TODO POR AMOR
Pero la versión del trabajador de 25 años fue poco consistente, hasta que la Policía de Punta del Este, logró desentrañar la verdad. Había sido salvajemente atacado por JMNR, enfurecido porque “se había metido” con su novia, MFG.
El día que el joven cobró el aguinaldo, la pareja acertó verlo en el centro de Maldonado, y decidió seguirlo hasta interceptarlo en Aparicio Saravia. Allí fue que JMNR lo ingresó al monte para “arreglar las cosas”, y terminó hiriéndolo gravemente y robándole los $ 16.000 del aguinaldo, con total conocimiento de su novia, MFG.
El mismo JMNR, el lunes 21 de enero del año 2008, siendo menor y sin poseer ningún tipo de anotación, miembro de una familia de trabajadores de Cerro Pelado muy alejada de cualquier tipo de delitos, protagonizó un impactante copamiento y secuestro de un empresario (vinculado a la fabricación de alfajores), su esposa y la pequeña bebita de ambos: los retuvo durante 8 horas bajo permanentes amenazas. Ese empresario le había dado trabajo hacía muy poco tiempo.
En el entorno de la hora 23.00 de aquella noche, el empresario se encontraba en su domicilio de la calle San Martín (barrio Reservas del Este de Maldonado), esperando que llegara su esposa. De pronto llamaron a la puerta y por una de las ventanas que se encontraba abierta, se recortó la figura de un chico, muy joven, que encapuchado y esgrimiendo un revolver (calibre 22) lo apuntó al cuerpo intimándolo a que lo dejara pasar.
En el interior, el precoz copador lo hizo sentar en un sillón y lo maniató con cinta de manos y pies, cuando a los pocos minutos llegó la esposa de la víctima con la bebita de ambos de solo 2 meses. Allí redujo también a la mujer, la ató de pies y manos y la sentó junto a su esposo, al tiempo de comenzar a solicitarles la entrega de todo el dinero que tuvieran en la casa.
Le entregaron todo lo que tenían, varios miles de pesos y algunos dólares, pero el chico insistía por más mientras los apuntaba permanentemente con el arma de fuego. Sobre medianoche, el hombre llamó por teléfono a un empleado de su comercio y le solicitó que le llevara a su casa todo el dinero que estuviera en el comercio, lo que el empleado hizo al poco tiempo sin llegar a sospechar nada de lo que estaba pasando.
Pero el delincuente, con una increíble frialdad siguió insistiendo por más dinero, hasta que a la hora 1.00, obligó a la pareja a subirse al automóvil de su propiedad y dirigirse hacia un cajero automático de la avenida Roosevelt para sacar dinero. Así lo hicieron, retirando una suma aproximada a los $ 10.000. Pero lejos de ser liberado, el matrimonio fue obligado a retornar a su casa, siempre bajo amenazas.
El menor, permaneció en la casa durante toda la noche; tanto las víctimas como el propio delincuente, llegaron en algunos momentos a ser vencidos por el sueño; dormitaron varias veces sin que la situación cambiara, hasta que la odisea terminó cuando sobre la hora 7.00, el muchacho cargó su mochila, y diciéndoles una y otra vez que no fueran a llamar a la policía, se retiró de la casa corriendo.
Apenas pudieron, llamaron a la policía que en minutos desató un impresionante operativo en la capital departamental. Con los datos precisos aportados por las víctimas, ya que el peligroso menor varias veces se quitó la capucha con la que había llegado, el chico fue detenido en boulevar Artigas y calle Arturo Santana sin ofrecer resistencia. Dentro de su mochila, llevaba el revolver calibre 22 y casi $ 45.000 en efectivo, además de otros efectos de la finca copada.
Aquel menor terminó en el INAU, y hasta ahora nadie supo nada más de él; era JMNR, quien en el mes de junio de ese mismo año 2008, había asaltado un comercio de la zona de Pinares, esgrimiendo un arma de juguete.

¿TODO POR AMOR?
Información recabada por FM GENTE, da cuenta que JMNR cometió aquellos delitos en 2008, acosado por su novia que se encontraba en España. Vía chat y correos electrónicos, la jovencita lo incitaba a juntar dinero para viajar a España. Como los padres de JMNR no podían darle ese dinero y hasta le negaban la posibilidad de viajar, decidió cometer aquellos delitos.
Ahora como mayor de edad, nuevamente por amor, rapiñó a un joven de 25 años, y casi lo mató hiriéndolo gravemente con un destornillador.
Redactado: R.A.