Las seis personas que fueron sometidas a la justicia tras haber sido detenidas el sábado por la noche, en los desmanes que se concretaron en la plaza 19 de Abril de Pan de Azúcar, fueron condenadas por delitos de daños, resistencia al arresto, agravio a la autoridad, entre otros. En todos los casos cumplirán las penas bajo régimen de libertad vigilada por su calidad de primarios. Son cuatro hombres y dos mujeres, de edades entre 20 y 22 años.
Lucas Brahian González Arias (22), Camilo Gastón Serrón (21), Jenifer Naomi Bravo (20) y Alexis Nahuel Rodríguez (20) fueron condenados como cómplices de 2 delitos de daños agravados en reiteración real y como autores de un delito de agravio a la autoridad policial agravado.
Para Camilo Gastón Serrón y Jenifer Bravo se fijó la pena de 8 meses de prisión a cumplirse en régimen de libertad a prueba con condiciones entre las que figuran arresto domiciliario nocturno y dos horas semanales de trabajo comunitario.
Para González Arias se ordenó pena de 9 meses de prisión, también a cumplir bajo régimen de libertad a prueba con las mismas condiciones que Serrón y Bravo.
En tanto, para Alexis Nahuel Rodríguez se fijó pena de 7 meses de prisión a cumplir bajo régimen de libertad a prueba con las mismas condiciones de todos los anteriores.
Luzmila Ortiz Pérez (20) también fue condenada pero como autora de un delito de intento de impedir la detención de otra persona agravado y se fijó pena de 6 meses de prisión a cumplirse igualmente bajo régimen de libertad a prueba con condiciones.
Fabián Alexander Martínez Más (21) fue condenado como cómplice de 2 delitos de daño agravado en reiteración real, con un delito de agravio a la autoridad policial agravado y un delito de resistencia al arresto agravado, éstos últimos en calidad de autor.
En su caso la pena será de 12 meses de prisión a cumplir en régimen de libertad a prueba con condiciones: los 2 primeros meses tendrá que guardar arresto domiciliario total, con autorización para trabajar de 13 a 18 horas; los restantes 10 meses cumplirá arresto domiciliario nocturno y siempre bajo supervisión de la OSLA, igual que el resto de los condenados.