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La justicia penal dispuso la condena de Carlos Javier Haladjián López, de 49 años, como autor responsable de reiterados delitos de hurto, uno de ellos en grado de tentativa.

El viernes, Haladjián fue detenido por personal de seguridad de un supermercado ubicado en Av. Piria y Buenos Aires, de donde intentó hurtar mercadería, lo que ya había hecho en varias ocasiones.

Alertada la policía, fue derivado a seccional y expuesto ante la justicia que le fijó pena de 8 meses de prisión a cumplirse en régimen de libertad a prueba: los primeros 3 meses de arresto domiciliario total -con autorización para trabajar de 08 a 17 horas- y los restantes 5 meses bajo lo dispuesto por el art. 295bis del CPP, incluyendo 4 horas de trabajo comunitario semanales.

Por otra parte, también fueron condenados dos hombres y una mujer que robaron una campera del interior de un auto.

Sucedió el viernes 29 en un estacionamiento de playa Chihuahua donde el trío rompió el vidrio de la puerta del acompañante del vehículo y concretó el robo. La policía los capturó poco después cuando llevaban la campera hurtada.

Bryan Alexander Bernes Silva (29) y Cecilia Jenny Cseszlyar Méndez (25) fueron condenados como autores de un delito de hurto agravado y Jorge Jesús García Fernández (21) como cómplice de un delito de hurto agravado.

Los dos primeros deberán cumplir pena de 12 meses de prisión, en régimen de libertad vigilada bajo condiciones, mientras que García pasará 5 meses en la cárcel.

También fue condenado Carlos Alberto Levy Videla como autor de un delito de violencia doméstica agravado en reiteración real, con un delito de desacato.

Levy fue denunciado por su ex pareja por violencia doméstica y se habían dictado medidas cautelares que prohibían que se le acercara, pero las cuales incumplió.

El jueves 28 la víctima manifestó que Levy había roto un cerco de su casa y estaba en su ventana.

La policía constató que el hombre llevaba la misma vestimenta descripta por la víctima al presentarse en dependencias policiales para ser indagado.

Sometido ante la justicia fue condenado a la pena de 12 meses de prisión, a cumplir en régimen de libertad a prueba: 3 meses de arresto domiciliario total -con autorización para trabajar de 09 a 19 horas- y los restantes 9 meses deberá presentarse una vez por semana en seccional, fijar domicilio, estará sujeto a la orientación y vigilancia de la OSLA, se ordenó tratamiento psiquiátrico, prohibición de acercamiento y comunicación a la víctima y tareas comunitarias durante 4 horas semanales por el total de la pena.

Se dispuso, además, el ingreso al Sistema de Monitoreo Electrónico pero la víctima se rehusó.