La solicitud de cobertura médica para las escuelas y de control a los menores que conducen carros con caballos, un pedido de informes sobre el alquiler de un particular que pagó el municipio y otro sobre ingreso de funcionarios a la Intendencia, se destacaron entre los planteos realizados el martes por la noche en la Junta Departamental.
El edil frenteamplista Roberto Domínguez solicitó que se hagan gestiones ante el gobierno que resulte electo en octubre para cumplir con la cobertura de emergencia médica en la enseñanza primaria. “Que tenga en cuenta este tema y a través de su presupuesto pueda prever los rubros necesarios para que las escuelas del departamento vuelvan a tener la cobertura médica de urgencia, que amerita por una cuestión de sensibilidad”, señaló.
Si bien admitió que se hacen esfuerzos, consideró que “no es lo mismo el voluntarismo que un hecho concreto”. En su opinión, debe seguirse el ejemplo de lo realizado en Montevideo, “previendo el mecanismo de la licitación las empresas pueden competir y los niños del departamento, acceder a la cobertura médica de urgencia”.
Por otra parte, Domínguez advirtió sobre el peligro que representan los carritos tirados por caballos que muchas veces son conducidos por menores en la capital departamental. En ese sentido, “pidió controles municipales para los menores –seguramtente hijos o familiares de hurgadores- que dirigen estos carros”, a veces a alta velocidad y sin señalización, en horas de la noche y la madrugada.
LAS DUDAS DE ELISEO
El nacionalista Eliseo Servetto realizó un pedido de informes sobre un expediente que otorga 78 mil pesos del municipio a un particular, por el alquiler de seis meses mientras se concreta su realojo en Cerro Pelado.
La resolución leída por Servetto en el plenario señala: “El director general de Hacienda resuelve: 1) Otórgase una colaboración de 78 mil pesos uruguayos a la señora María del Luján Calabuig Sánchez, por concepto de arrendamiento de una vivienda transitoria durante seis meses. Debiendo hacerse efectivo en un solo pago. 2) Notifíquese a los interesados y sigue a la división contaduría para su cumplimiento”.
Leído este párrafo, Servetto preguntó: “¿Quién es el propietario de la vivienda? ¿Dónde está ubicada y con qué comodidades cuenta?”, ya que según sus cálculos de acuerdo a los valores de las viviendas comunes, “esta pasa el doble de los valores normales”. También se preguntó quién es el responsable de contratar este alquiler y por qué se eligió este método y no el empleado anteriormente, a quienes realojaron en Cerro Pelado.
Servetto consideró que esta decisión deja mucho que desear, en tanto unas 13 familias que también esperaban realojarse en Cerro Pelado fueron ubicadas en un lugar que carecía de agua potable y luz eléctrica. “Hay necesitados de primera y de segunda? ¿Así es que el gobierno cumple con la prédica sobre la igualdad de la persona en sus derechos? ¿O a los amigos se les trata distinto?”, inquirió.
LOS CONTRATOS SEGÚN MOROY
Por su parte, el edil Guillermo Moroy presentó un pedido de informes para conocer cuántos nuevos funcionarios han ingresado al municipio en este período y detalles sobre la relación contractual de trabajadores en diferentes áreas.
Moroy señaló que hay contratos de obra que pueden justificarse, como el de un asesor sobre los centros de convenciones, especializado a nivel mundial, que sí está cumpliendo esa función y que quizás sea el único capacitado en Uruguay para hacerlo. “Pero hay otros que son tareas rutinarias, o de peones o de sociólogos, que están continuamente renovando los contratos. Por eso le pedimos al señor intendente que nos aclare qué relación contractual, qué montos se están pagando y desde qué época están funcionando en esa modalidad”, indicó.
Añadió que tiene en su poder los nombres de algunos funcionarios con contratos llamativos, pero no le pareció “de buen gusto” mencionarlos en su pedido de informes. “Por un hecho de mantener la privacidad de estas personas. Yo no cuestiono que la gente haga este tipo de tareas pero me llama la atención la cantidad que son. Muchas de ellas son de 2 o 3 años, con una relación bastante prolongada en el tiempo”, señaló.
(M.R.)