Cada año se detectan 230 casos de cáncer de ovario en mujeres uruguayas, de las cuales 130 mueren por esa patología, destacó en FM Gente la doctora Isabel Alonso, jefa del departamento de Oncología Clínica del hospital Pereira Rossell. La baja tasa de supervivencia está vinculada al diagnóstico en etapa tardía, generalmente, por desconocimiento de los síntomas y falta de controles.
Este miércoles se conmemora el primer Día Mundial contra el Cáncer de Ovario, con el cometido de concientizar a las mujeres sobre la necesidad de que se controlen anualmente con un ginecólogo. En Uruguay esta patología afecta a más de 230 mujeres al año y un dato preocupante es que el 90% de quienes lo desarrollan no tienen antecedentes familiares.
“No quiere decir que 130 mujeres mueran en el mismo año (en que se detecta el cáncer de ovario) es el índice de mortalidad que tenemos. El problema es que es una patología que nunca llegamos al diagnóstico temprano, no tenemos un método de screening como en la mamografía o de detección a través del Papanicolau. Lo único, es que las mujeres vayan al ginecólogo una vez al año para que las revisen”, advirtió la doctora Alonso.
Explicó que el cáncer de ovario incide mayormente entre los 55 y 65 años de edad, aunque existen otro tipo de tumores “germinales” en personas jóvenes que tienen un alto índice de curación.
SÍNTOMAS DUDOSOS
La doctora señaló que pueden aparecer síntomas como: distensión, dolor pélvico o abdominal, dificultad para comer o sentirse lleno rápidamente, sentir la necesidad de orinar con frecuencia o urgencia, fatiga, malestar estomacal o acidez estomacal, dolor de espalda, constipación o cambios en la menstruación.
Se trata de síntomas “que no son muy específicos” y que suelen confundir a las mujeres. “Cuando el órgano da síntomas o crece, en general la persona piensa que le cayó mal la comida y no consulta”, graficó Alonso. Y cuando aparecen estos síntomas, generalmente el tumor se encuentra en un estadío tres o cuatro y se extendió por el peritoneo.
Por eso entiende que la mejor forma de prevenir este cáncer es “consultar al médico e ir una vez al año al ginecólogo, aunque el PAP lo pidan cada dos o tres años. A veces un tumor primario se detecta cuando la persona se hizo una ecografía por otra cosa, pero es un diagnóstico fortuito”.
En estos casos se puede llegar a operar, pero hay situaciones en las cuales no hay cirugía posible y es necesario hacer tratamientos de quimioterapia para mejorar la situación oncológica. Por otra parte, Alonso remarcó que todos los días surgen drogas nuevas y hay múltiples líneas de tratamiento.
No obstante, “el índice de curación, de larga sobrevida, es del 55%”. La sobrevida libre de progresión del cáncer de ovario a 5 años es del 88.9% para el cáncer de ovario en la etapa 1ª, en comparación con el 13.7% para cáncer de ovario en la etapa IV, añadió.
SEXTA CAUSA DE MUERTE FEMENINA
El cáncer de ovario es la sexta causa de muerte tanto en incidencia como en mortalidad en las mujeres uruguayas. Por eso es bueno “que el ginecólogo examine. Ahí se puede encontrar que hay un ovario que está aumentado de tamaño. También es importante concientizar que es un órgano que puede dar problemas y que es bueno consultar”, remarcó la doctora.
Precisó que los factores hereditarios inciden en no más del 10% de las pacientes y, en este sentido, recomendó una rápida consulta a las mujeres que tienen madres o hermanas con este tipo de patología. Sin embargo, en el resto de los casos, no hay conductas específicas para reducir factores de riesgo.
mr