La interpretación de las recientes modificaciones a la Ordenanza de la Construcción en La Pastora, favorable a un inversor en esa zona, generó molestia en la bancada oficialista porque no fue consultada por el Ejecutivo. Por lo menos dos ediles de Cabildo están furiosos porque el expediente con la resolución llegó a la Junta Departamental sólo porque algunos vecinos al padrón “favorecido” se quejaron ante la comuna.
El expediente ingresó en diciembre a la Comisión de Obras de la Junta Departamental y el caso fue analizado esta semana por la bancada oficialista. Durante el encuentro hubo fuertes críticas de al menos cuatro ediles – dos de Cabildo– hacia el director de Planeamiento Urbano y Ordenamiento Territorial de la comuna, Julio Riella.
El asunto en cuestión es que, a la luz de los cambios aprobados a la Ordenanza de Construcción, el representante argentino de un grupo inversor solicitó al Ejecutivo que le permitiera construir con más altura de lo permitido en tres de los cuatro padrones que tiene en La Pastora y que pretende unificar para desarrollar un millonario proyecto.
Para esto el Ejecutivo realizó una interpretación unilateral de la norma y terminó accediendo al petitorio, bajo el entendido de que no modifica lo aprobado por la Junta Departamental.
TRES POR UNO
Los desarrollistas pretenden construir un bloque de 62 metros de altura aunque, de acuerdo a las nuevas normas, eso no está permitido en tres de los padrones porque integran la faja frentista de 100 metros donde el tope es inferior.
“En términos generales, cuando un predio se encuentra ubicado en dos zonas de la ordenanza, parte en cada subzona, las oficinas técnicas aplican la normativa que beneficia al gestionante”, argumenta la dirección de Planeamiento, según el expediente al que accedió FM Gente.
Agrega que este criterio ha sido adoptado en “numerosos casos” de terrenos de la península que son frentistas a dos calles, teniendo en cuenta que el padrón se encuentra “comprendido en las dos zonas y la ordenanza no indica cuál es la subzona que corresponde en caso de ambigüedad”.
Sobre esa base, Planeamiento consideró “que era viable la construcción de los solicitado por ampararse a la ordenanza de ‘subzona Resto’, que afecta parte de ese padrón”.
PROTESTA Y REACCIÓN
Al enterarse de esa resolución, dos propietarios vecinos manifestaron al Ejecutivo su descontento porque la norma “no fue correctamente aplicada” y remarcaron su “profunda preocupación” por la magnitud de la excavación que significará la construcción de un edificio tan alto.
El planteo se añadió al expediente del caso y fue analizado por la dirección de Pleneamiento, que insistió en sus argumentos y lo elevó a consideración del intendente Óscar De los Santos. Luego, desde la secretaría general, el documento fue enviado finalmente al Legislativo.
En la reunión de la bancada oficialista, esta semana, sectores afines al intendente se expidieron a favor de la resolución del Ejecutivo y salieron en defensa de Riella, a quien dos ediles de Cabildo fustigaron duramente y acusaron de otorgar “una excepción” edilicia, según supo FM Gente.
Aunque con una postura un poco más moderada, otros dos ediles de la bancada también se preguntaron si el Ejecutivo incurrió en una “irregularidad”, al elevar la altura permitida en tres terrenos con el argumento de equipararlo a uno solo y beneficiar notoriamente al grupo inversor. Tampoco ocultaron su molestia porque, de no haber mediado el planteo de los vecinos descontentos, la bancada nunca se habría enterado de tal medida.
En cualquier caso, todos los ediles coincidieron en convocar a Riella y su equipo a una reunión el próximo lunes 23, para que les explique los pormenores del caso y los motivos por los cuales omitieron considerar la opinión del Legislativo.