Un informe de la Dirección Nacional de Medio Ambiente respaldó los trabajos realizados por la Intendencia de Maldonado para recuperar y mantener el cordón de dunas en la Playa Brava. Estas acciones habían levantado fuertes críticas, fundamentalmente de políticos y dirigentes nacionalistas de Punta del Este.
Una escueta carta de la citada repartición ministerial, con un informe adjunto, llegó a manos del concejal nacionalista Alberto Heber, quien había solicitado la intervención del gobierno nacional para frenar lo que consideraban un atropello a la naturaleza del balneario. Una copia de la misma documentación llegó a la dirección general de Higiene y Protección Ambiental de la IDM, en las últimas horas.
Según el organismo regulador de las políticas de medio ambiente a nivel nacional, las tareas de remoción de arenas en las paradas 3 a 5 de la Playa Brava fueron “adecuadas en líneas generales”. De todas maneras, las jerarquías nacionales solicitaron al gobierno departamental que les curse una comunicación previa a la ejecución de obras de este tipo.
La DINAMA pidió a la IDM que “de ahora en adelante gestione ante el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente (MVOTMA) la autorización para el ingreso de maquinarias a la costa en carácter períodico”.
Días atrás, cuando la presencia de maquinaria pesada y camiones en la costa generó polémica entre vecinos y autoridades, expertos de la Intendencia explicaron el procedimiento. En los hechos, se trata de un sistema habitual que permite recuperar la arena que es arrastrada por el viento hacia la rambla y un posterior proceso para afianzar la arena, de alta movilidad por falta de vegetación.
(foto: El País)
Según dijo entonces el oceanógrafo Pablo Núñez, encargado de Gestión Costera de la IDM, a la reubicación de los médanos seguirá la plantación de especies que contribuyan a la fijación de la arena en un procedimientos similar al aplicado el año pasado en las dunas de Playa Mansa.
El funcionario afirmó que en ningún momento se extrajo arena de la zona sin autorización y aclaró que, lo que algunos vecinos observaron como un robo, respondía al retiro de arena con escombros productos de recientes obras de edificios en la zona.