Sucedió en un domicilio de Alberto Dura y Manolo Lima donde una mujer explicó a la policía que, durante la hora de mayor actividad de fuegos artificiales, escuchó un ruido diferente y al ingresar al dormitorio encontró el proyectil incrustado en el techo de lambriz.
Al lugar concurrió Policía Científica y la denunciante entregó el proyectil hallado.