Facebook Twitter WhatsApp

Espert consideró que el presidente argentino, Mauricio Macri, “ha hecho cosas muy buenas, otras regulares y en otras viene defeccionando”. Entre las “muy buenas, está dejar de hacerle la guerra al campo. Era absurdo hacerle la guerra al sector más productivo, más competitivo, más dinámico de Argentina. No había manera que un plan que le hiciera la guerra al campo terminara bien. Y terminó mal, obviamente”.

También apuntó que le apere bien que Macri haya retomado el contacto con occidente. Con la participación en el Foro de Davos.

“Creo que el manejo de la deuda es correcto. Me parece bien que se esté tratando de cerrar el problema que el kirchnerismo le dejó en el juzgado de Griesa con el ‘default’”, señaló.

“Veo más dudoso si el ajuste de tarifas y el tipo de cambio tan gradual va a terminar teniendo los efectos buscados, es decir una baja de las tarifas y una mejora del tipo de cambio en términos reales”, apuntó.

“Y finalmente, el plano en el que me parece que el gobierno está patinando es en el fiscal-monetario”, agregó. Estimó que no va a bajar el déficit fiscal durante este año y va a estar en récords históricos otra vez, como el año pasado, en 7 u 8 puntos del PBI.

Dijo que esto va a obligar a colocar una cantidad de deuda importante en el mercado internacional, “que puede complicar en los próximos años, o si no a ceder y emitir más, lo que puede complicar el frente inflacionario”.

Señaló que el ajuste de los docentes que se está negociando, del 40%, y del 30 o 45% en la provincia de Buenos Aires, muestra que la meta inflacionaria del 20 o 25% que se fijó Macri “no es creíble”.

El economista recalcó que si Macri no se presenta el 1 de marzo ante el Congreso y dice el “desastre” que le dejó el kircherismo y fundamenta las medidas de ajuste que hay que seguir haciendo, “la situación económica puede seguir complicada como ahora, con el nivel de actividad que no arranca, la inflación muy alta y una tensión permanente”.