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La aplicación de un plan para recuperar activos y una línea crediticia de $ 883 millones, en unidades reajustables, para financiar el segundo semestre de este gobierno constituyen las mejores vías para manejar el déficit acumulado en la Intendencia de Maldonado, según definieron el miércoles 12 el intendente Gustavo Salaberry y su futuro sucesor, Óscar de los Santos.

Sobre esa base, por estos días la situación económico-financiera de la IMM es motivo de reunión entre las jerarquías comunales y la bancada oficialista en la Junta Departamental. También es tema de conversación entre el intendente electo Óscar de los Santos y los líderes de la oposición.

El próximo lunes 24 el intendente Salaberry comparecerá ante la Comisión de Presupuesto del legislativo departamental, junto al director de Hacienda Pedro González y el prosecretario Jorge Mesa, para detallar a los ediles oficialistas y del Partido Nacional cómo se compone el déficit. “El tema es cómo lo vamos a resolver y cómo manejarlo”, señaló el jefe comunal este jueves, en FM Gente, tras insistir en que el déficit de la comuna “no es producto de este gobierno sino del anterior”.

Salaberry tiene cifradas esperanzas en este encuentro. Por un lado espera que esta comparecencia desactive el llamado a sala pedido por la agrupación nacionalista Renovación, que lidera el ex diputado Federico Casaretto. “Si tenemos que ir a un circo vamos a un circo. No tenemos ningún problema”, contestó respecto a la convocatoria. De todas maneras se mostró partidario de “resolver las cuestiones” en otros ámbitos, como la propia Comisión de Presupuesto de la Junta.

“Para el sistema político es mucho mejor porque los llamados a sala generalmente no quedan en nada. Se tornan en un gran escenario. Estamos para construir, ya pasaron las elecciones, no tiene sentido. Por supuesto que si esto no se levanta vamos a ir, pero eso también es parte de las conversaciones que tenemos pendiente”, enfatizó.

CRÉDITO POR 34% DE LA RECAUDACIÓN

Por otro lado, Salaberry espera que los ediles de la oposición entiendan la necesidad de acceder a una línea de crédito que facilite la gestión en el último semestre de este gobierno y en el inicio del próximo. Es que, para conseguir la anuencia de la Junta Departamental, se requiere una mayoría especial con la cual no cuenta el Ejecutivo comunal.

El envío de la solicitud de anuencia está siendo analizado con la bancada oficialista, dijo el intendente. “Estamos explorando cuál es el espíritu para acompañar una medida de este tipo. Lo estamos haciendo con la oposición, lo están haciendo los ediles. Informaremos a la Comisión de Presupuesto porque es parte de lo solicitado por la oposición. Explicar cuál es la situación del déficit, cómo están las cuentas, cuál es su estructura.”

Salaberry subrayó que es necesario “llenar ese agujero que tiene la IMM sobre el segundo semestre de cada año, donde empieza a faltar el dinero”. En ese sentido, argumentó que el Ejecutivo intenta “buscar una herramienta que sirva más allá del período de gobierno, que es esta línea de crédito que quede abierta y que signifique un flujo de caja para el gobierno que sale y para el que entra”.

A su juicio, la IMM tiene “una excelente recaudación y está en un momento de auge, de expansión y desarrollo, no hay que jugar al achique”. El crédito llegaría al 34% de la recaudación comunal del año 2009: “Es como si una familia pidiera un crédito por cuatro meses de salario. Si bien se ha inflado tanto el tema del déficit, hablamos de una cifra completamente manejable para el presupuesto de cualquier gobierno”.

RECUPERACIÓN DE ACTIVOS

Mucho más viable resulta la ejecución de un plan de refinanciación de deudas para contribuyentes morosos. Para que la Junta apruebe esta medida, de aplicación a corto plazo, alcanza con los votos frenteamplistas. Y por eso Salaberry adelantó que el proyecto será presentado seguramente esta semana.

El jefe comunal es optimista en cuanto a un rápido trámite. Detalló que el plan se aplicará con las mismas características que el ejecutado al inicio de este gobierno, en 2005. “Abarcará a todos los tributos municipales – fundamentalmente contribución inmobiliaria y patente de rodados- y apunta a quitar las moras y recargos y financiar la deuda en cuotas. Hay dos sistemas, uno en pago contado hasta en cuatro cuotas y otro hasta en 36 cuotas. Habrá un par de meses de plazo para acogerse al Plan”, explicó. Agregó que, con esto, la Intendencia espera recuperar entre US$ 5 millones y US$ 10 millones que den un respiro a sus arcas.

EL AS EN LA MANGA

“No queremos llegar a la misma situación que llegamos en 2005, donde había atrasos muy grandes, algunos de ocho o diez meses, fruto de que no había posibilidad de tener una línea de crédito antes de asumir el gobierno”, puntualizó.

No obstante, sostuvo que el gobierno departamental tiene hoy una alternativa, también acordada con el intendente electo, que implica “utilizar hasta el extremo” el crédito bancario que ya está habilitado. “No lo hemos tocado. Ese es el as en la manga. Tenemos 0 deuda con los bancos”, destacó Salaberry. Sin embargo, sostuvo que esta es “la última herramienta” y no dudará en utilizarla para cumplir con los pagos.

El intendente aseguró que la comuna está cumpliendo con los salarios, pagando a proveedores “chicos” y negociando o definiendo refinanciaciones con los más grandes. “No hay una situación caótica ni de cesación de pagos como se ha manifestado en la prensa. Hay algún atraso, que siempre tiene la IMM”, precisó. A modo de ejemplo, dijo que el reclamo de atrasos en el pago de las horas/ciudad del servicio 222 de la Policía no se debió a falta de dinero sino a “una cuestión de tramite”.
“Por suerte por ahora tenemos caja, pero tendremos dificultades si no resolvemos en el corto plazo.”

NUEVO ORGANIGRAMA

Salaberry aseguró que en este período la estructura del déficit tuvo una “evolución positiva” porque bajó el gasto en el rubro 0 y aumentó el gasto en inversiones. Sin embargo, informó que el equipo de transición acordó “encarar la estructura actual de la IMM y llegar al intendente electo con algún proyecto para reestructurar el organigrama y una nueva lógica de funcionamiento”.

A su juicio, esto no pasa por la reducción en la plantilla de personal. “La IMM aumentó la capacidad de acciones en determinadas áreas, está trabajando en áreas nuevas y eso habla de expansión. Cuando se habla de expansión no se puede hablar de reducción. Lo que hay que ver no es tanto el número como la calidad, la formación y el rendimiento que tienen los funcionarios. No es hablar de cantidad, sino de calidad. La cantidad de funcionarios no es el problema grande de la IMM sino el rendimiento que tienen”, sentenció.