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“Es una obra que jerarquiza y que pone valor a algo que era tradicional. La voy a defender con uñas y dientes porque es un buen proyecto y quiero que se mantenga como está”, dijo Laventure al diario Correo de Punta del Este.

Semanas atrás, la Intendencia de Maldonado ordenó detener la construcción porque superaba los metros autorizados. De hecho, el director general de Planetamiento Urbano y Ordenamiento Territorial de la IDM, Julio Riella, sostuvo que el exceso de obra sería destruido.

Sin embargo, ahora Laventure asegura que el proyecto fue aprobado por unanimidad del concejo municipal y entiende que las protestas en su contra son “desproporcionadas”. En el mismo sentido se expidió el concejal nacionalista Julio Pintos, este martes en FM Gente.

“La obra tenía previsto 3.10 metros de altura en su momento, pero se modificó a 4.10 por la instalación de un deck de madera para facilitar el acceso de las personas. Cuando Planeamiento lo detectó, la obra se detuvo y los arquitectos explicaron los motivos por los cuales se modificó la altura”, argumentó el concejal.

Días atrás, la filial Maldonado de la Sociedad de Arquitectos del Uruguay pidió que la construcción sea demolida y que se retiren todos los materiales agregados a la zona rocosa de El Emir, por entender que “atenta” contra el paisaje y también contra “los sentimientos” de los puntaesteños.

(foto de archivo / M.Gallardo)