Uno de los panelistas del 2° Taller de Discusión Sobre Excepciones a la Planificación Territorial, realizado en la Liga de Fomento el pasado viernes, José Sciandro, sostuvo que Punta del Este se está gestionando a través de excepciones, utilizando procedimientos que se ajustan a requerimientos de particulares. Además, señaló que los cambios que esto provoca no son sustentables y que en el caso del proyecto para el hotel San Rafael, hay que escuchar a los vecinos.
“El punto es que Punta del Este, últimamente, se está gestionando a través de excepciones, no a través de un ordenamiento territorial legislado y cierto sino a través de un procedimiento que se ajusta a requerimientos de particulares que pretenden cosas que no están en la ordenanza y que, en definitiva, no estaban previstas por la comunidad”, señaló Sciandro.
Sostuvo que es un aspecto preocupante, independientemente del caso puntual que hoy está en boga (San Rafael), porque “esto ya viene siendo una tendencia de la política actual de ordenamiento territorial de Maldonado”.
Recordó que las excepciones a la ordenanza comenzaron a aplicarse en el año dos mil, a raíz de la gran crisis del país, en una suerte de “franquicia al ordenamiento territorial” para promover la mano de obra.
“Eso implicó un cambio sustancial en la normativa vigente y hoy día volvemos a implementar la misma política y en definitiva los cambios que eso provoca en el ordenamiento del lugar no entendemos que son sustentables”, dijo.
En el caso San Rafale, Sciandro afirmó que “lo primero es oír a los vecinos, escuchar qué opinan ellos que son quienes pagan la contribución inmobiliaria, mantienen sus casas, tienen personal que está a cargo de esas casas y eso es desarrollo local. A esas personas debemos escuchar cuando planteamos una excepción de esta dimensión en el ordenamiento territorial vigente”.
foto: Correo de Punta del Este