Facebook Twitter WhatsApp

Lucía Pereyra tenía dos trabajos. Durante el día trabajaba como cocinera y durante la noche como delivery. Ese 13 de marzo terminó una de sus jornadas laborales y pasó por la casa de su abuela a saludarla, una rutina que mantenía a pesar de estar ocupada, “le dio un beso y le dijo que la amaba”, contó su tía Catalina en conversación con FM GENTE.

En el trayecto a su casa, una camioneta conducida por un joven de su misma edad “giró a la izquierda para doblar, sin frenar, y se la llevó puesta”, relató Catalina.

Lucía falleció casi tres horas después en el sanatorio. Tenía varios órganos comprometidos producto de la hemorragia interna que le provocó el choque.

Cuando todavía estuvo consciente, en el lugar del siniestro, aportó sus datos. Incluso dio el celular de su madre para que le avisaran sobre lo sucedido. “En ese momento no se dio cuenta de la gravedad de ella. Pensó en la moto, se la había comprado hacía poco con mil sacrificios, porque la otra moto que tenía se la robaron y todavía la estaba pagando”, contó su tía.

“Sus últimas palabras fueron ´llamen a mi abogado, este tipo se me tiró´”, dijo Catalina. “Ella venía correctamente por su lado, con el casco puesto, a una velocidad adecuada. Sabía que él tenía la culpa”, agregó.

PEDIDO DE JUSTICIA

Este miércoles 8 a las 15 horas la familia de Lucía convoca a una manifestación pacífica en Torre del vigía, frente a Fiscalía, y pide a la población que acompañe la iniciativa.

“Uno nunca se imagina estar de este lado. Nunca se imagina que le va a tocar, pero le puede tocar a cualquiera”, expresó su tía. “Ese día fue a ella, podría haber sido otra persona, porque él dobló como venía sin importarle nada. Lo único que dijo fue ´no la vi´”, agregó.

El conductor fue formalizado por la presunta comisión de un delito de homicidio culpable. Fiscalía dispuso 90 días de medidas - que implican la fijación de domicilio y la prohibición de conducir vehículos motorizados - mientras investiga el hecho.

“No es justo que nosotros estemos destrozados y que la Justicia a él no le de nada”, reclamó. “Nosotros no queremos que lo manden a la casa, tiene que pagar por lo que hizo”.

“Él puede salir y sabemos que anda de fiesta en fiesta”, apuntó.

El 12 de junio se cumple el plazo dispuesto por Fiscalía y deberá pronunciarse al respecto. “No confiamos en la justicia porque estamos viendo en todos los casos que les dan un cinchón de oreja a las personas y que se vayan para su casa y no es así. Queremos que se pague como tiene que ser. Destrozó una familia completa”.

“Si no le dan lo que corresponde apelaremos y la tendremos que seguir. No vamos a negociar ni aceptar dinero”, sentenció.