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El 13 de diciembre de 2016 un hecho, inusual por sus características, sacudió la escena policial del departamento: una ciudadana argentina sufrió un intento de secuestro en la Ruta Interbalnearia, a poca distancia del aeropuerto de Laguna del Sauce, cuando retornaba de la terminal aérea.

La mujer había ido a llevar a su esposo, un empresario argentino, cuando fue detenida por un supuesto control policial en la ruta. En ese momento dos hombres y una mujer, vistiendo chalecos, abordaron su auto, la golpearon y pretendían que se pasara al asiento de atrás.

En los audios en los que Alejandra narra los hechos a un grupo de Whatsapp que integraba, y a los que accedió FM GENTE, contó que la “picaneaban” y que le pareció que no querían robarla ya que tenía su cartera, reloj y otros efectos que no llamaron la atención ni fueron exigidos por los desconocidos.

La mujer también relató que se salvó porque otros autos que circulaban por la ruta en la misma dirección comenzaron a enlentecer la marcha también pensando que había un control policial y que un par de ellos, cuando pasaron por el costado de su vehículo, escucharon sus gritos y pararon unos metros más adelante.

Al ver esto, los desconocidos abordaron dos autos, un VW y una camioneta Parati roja, que estaban detenidos a un costado y se dieron a la fuga.

Alejandra se comunicó con su pareja para que no abordara el vuelo y volvió hacia la terminal aérea adonde fue denunciada la situación a las autoridades y también recibió atención médica por parte de una doctora.

Además, FM GENTE pudo saber que hubo una llamada al servicio 911 hecha por un hombre que pasó por el lugar en su auto y que al ver la situación de la mujer forcejeando con lo que parecían "inspectores" o "policías" se decidió a dar cuenta a las autoridades.

Asimismo, el denunciante habría logrado establecer la matrícula de uno de los coches utilizados por el grupo que, en la huida, dejó abandonada una suerte de planilla con la que simulaban hacer el control.

En cuanto la policía tomó contacto con la situación se puso en marcha una investigación que incluyó peritajes al auto en búsqueda de huellas, chequeo de cámaras de video vigilancia y otras actuaciones.

La investigación del caso redundó en la detención de una peluquera y la requisitoria para dos hombres por su participación: uno de ellos un ex futbolista, apodado “El Ruso”, que en aquella época residía en Punta del Este y frecuentaba la sala de casinos de Enjoy en la que había conocido a la pareja argentina.

“El Ruso”, un sexagenario que en los años 70 formó parte de varios equipos de la primera división del fútbol de Montevideo, alardeaba de tener una cómoda posición económica y era visto de forma habitual junto a dos hijos, quienes también fueron indagados por la policía en aquel momento.

La peluquera procesada, al comparecer ante la juez penal de 4° turno Adriana Morosini, dijo que el propósito del asalto fue robar la camioneta Jeep Cherokee que conducía la ciudadana argentina.

Los investigadores policiales, en cambio, entendían que el caso era más grave y que todo apuntaba a un intento de secuestro para extorsionar al marido mediante la exigencia de un pago de rescate millonario.

La mujer procesada vivía la mitad de su tiempo en la ciudad de Sauce, en el departamento de Canelones. La otra parte del año residía en Punta del Este donde era propietaria de un apartamento en la Parada 5 de la rambla Lorenzo Batlle Pacheco, sobre la playa Brava.

En Punta del Este la mujer trabó amistad con los otros dos integrantes del grupo y con uno de ellos mantenía una relación amorosa.

Desde ese momento los hombres participantes en el hecho, entre ellos “El Ruso”, quedaron requeridos y este miércoles causó sorpresa que el ex futbolista se hubiera presentado en una dependencia policial, en San Carlos.

La información vinculada al paradero de este individuo señalaba que estaba viviendo en Chile y, ahora, una de las preguntas que se buscan aclarar es cómo y cuándo ingresó nuevamente al país y por qué no saltó en ese momento la requisitoria pendiente sobre su persona.

No obstante, en San Carlos sí fue advertida la situación por lo que “El Ruso” quedó detenido y se dio cuenta a fiscalía.

El abogado de la mujer víctima del intento de secuestro, Dr. Alejandro Balbi, dijo a FM GENTE que, tras la declaración ante la justicia, se dispuso la libertad para el sujeto y se le impuso el cierre de fronteras. También se ordenó un careo con la peluquera y tomar testimonio a un hijo de “El Ruso”.

“Suponemos que la causa tomará su cauce natural el lunes cuando asuma el juez y la fiscal titular del caso”, explicó Balbi.

“Lo que más llama la atención es cómo una persona requerida no haya sido detectada en su ingreso al país, porque el propio involucrado confesó que se había ido por frontera seca inmediatamente de ocurrido el hecho y ahora dijo que ingresó a Uruguay en diciembre, hace un mes; él dice que ingresó por Carrasco, no nos consta”.

El abogado explicó que su cliente está preocupada ya que sigue viviendo en Punta del Este y pensaba que esta persona estaba en el exterior, pero resultó que estaba en el departamento de Maldonado.

Balbi recordó que la participación del ex futbolista en el caso fue señalada directamente por la peluquera procesada, y que ha cumplido pena de prisión durante más de tres años, y cuya seguridad también se podría ver comprometida con la libre circulación del individuo por Maldonado.

“La semana que viene vamos a comunicarnos con el juez y con la fiscal para ponernos a la orden porque esta persona está en el departamento y tiene que responder ante la justicia”, afirmó Balbi.

La justicia “reforzó” el cierre de fronteras impuesto sobre “El Ruso” aunque continúa sin explicación el “agujero negro” de su retorno al país.


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