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¿En qué consiste esta operación? La prótesis hidráulica, que todavía no está disponible en Uruguay y será colocada por única vez en el paciente operado en el Hospital Maciel, está indicada para ciertas personas que tienen una disfunción eréctil refractaria. Es decir, que no responden a ningún tratamiento, ya sea con medicación o hasta inyecciones intracavernosas.


Así lo explicó Laura Mouro, jefa del Servicio de Urología del Hospital Maciel, en una rueda de prensa. La médica explicó que en Uruguay lo que sí se coloca hace años son las prótesis de pene pero semirígidas. "Son más económicas pero siempre están como en estado de erección, esta es distinta porque vuelve a ese mecanismo valvular a quedar en estado de reposo el pene entonces es más fisiológica", explicó.

El cirujano chileno a cargo de la operación, Reynaldo Gómez Illanes, explicó la diferencia entre una y otra prótesis.

Ambas se implantan dentro del pene, pero en el caso de la semirígida "deja el pene en erección permanente". Esto, dijo, es "eficaz y funciona bastante bien, pero es un poquito menos cosmético".

Por el contrario, la prótesis hidráulica reproduce "de forma natural el ciclo normal del pene". Es decir, del estado de flacidez al de erección.

El paciente que lo tiene puede, a voluntad, poner "la prótesis rígida" para llevar adelante la actividad sexual, pero también "la puede desinflar para tener un aspecto más natural".

Esa reproducción, que hace que el pene pase de un estado a otro, se activa de una forma valvular. "Tiene un sistema valvular, una bomba que se coloca en el escroto, en la bolsa donde están los testículos".

"Tiene una bomba que el paciente aprende a accionar a voluntad", explicó el médico chileno. Al activar esa bomba, "puede transferir líquido desde un reservorio que tiene implantado dentro del abdomen hacia los cilindros inflables que están en el pene y con eso logra acción".

"Además, tiene un botón de desinflado, lo cual revierte el proceso y desinfla la prótesis", afirmó.

El médico señaló que la efectividad de este tipo de tratamientos debe ser medida por distintos aspectos, por ejemplo el "grado de satisfacción" del paciente en su actividad sexual. En ese sentido, explicó que se supera el 80%.

Gómez Illanes afirmó que este tipo de prótesis no puede ser colocada en cualquier paciente, sino que la persona debe entender que es una "prótesis", es decir, "una alternativa".

"Lo mismo cuando tú pones un paciente que sufre una amputación y le colocan una prótesis en una pierna, le sirve para caminar, pero nunca va a ser igual a su pierna normal", apuntó.

LA IMPORTANCIA DE ESTA PRÓTESIS INÉDITA EN URUGUAY

Mouro aseguró que si bien la prótesis no está todavía disponible en Uruguay, es importante debido a que ayuda a la formación de los profesionales uruguayos, ya que el médico chileno a cargo del procedimiento es quien enseña este tipo de implantes en América Latina.

"Es bueno que la gente sepa que está esta opción y que en un futuro el sistema esté preparado para poder brindarle a todos los usuarios una opción que, en el momento, es la mejor", explicó Mouro.

En Uruguay la prótesis semirrígida que se coloca no está cubierta por el Sistema Nacional Integrado de Salud, pero sí por el Banco de Previsión Social para los pacientes que están en actividad.

"Pero son prótesis que salen bastante menos", señaló.

En el caso de que una persona quiera acceder a este tipo de prótesis hidráulica, deberá hacerlo de forma privada.

"Lo bueno de estas instancias es que los usuarios sepan que está esto y que a la larga se logren mecanismos de poder cubrir estas cosas. Porque a veces uno piensa que la disfunción eréctil no es una enfermedad, es una enfermedad y es importante. Genera mucho estrés en la persona qu lo padece y no tienen que verlo como algo tan sexualizado: es una enfermedad y como tal tiene tratamiento y debe ser tratada".








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