Así lo reveló una recorrida que dirigentes de la Federación de Empleados del Comercio y Servicios (Fuecys) realizaron este martes por empresas de Maldonado. Yusara Herrera, delegada de Seguridad del gremio, aseguró a FM Gente que “se detectaron un sinfín de irregularidades y varios casos de acoso laboral”. También denunció la existencia de numerosas empresas sin control del Registro Nacional de Empresas de Seguridad (Renaemse) que, aun así, son contratadas por organismos públicos.
Se estima que unas 2.000 personas trabajan en Maldonado como guardias de seguridad en el sector privado, de las cuales la mitad sufre algún tipo de irregularidad. Herrera detalló que hay múltiples casos de empresas donde el personal está “fuera” del convenio salarial del sector, sin uniformes, sin capacitación, con tareas que no les corresponden, o bajo acoso físico, psicológico y verbal.
La dirigente expresó, además, que son varias las empresas golondrinas que trabajan en verano sin ningún tipo de control y se retiran en febrero, sin pagar a sus trabajadores. En ese sentido, señaló que hay al menos siete guardias en esa situación, en algunos casos víctimas de una empresa contratada por la propia Intendencia de Maldonado.
ACOSOS VARIOS
Herrera sostuvo que las pocas guardias mujeres suelen ser hostigadas por supervisores y advirtió que el gremio pondrá “la tecnología a disposición” para frenar tales atropellos. “El acoso de los supervisores es difícil de comprobar porque esperan a que estén solas”, señaló Herrera.
Por el momento, el gremio está pidiendo a las funcionarias que utilicen sus celulares para grabar al acosador. Pero también pondrá “la tecnología a disposición”. “Ellos nos controlan los movimientos y ahora que estamos con esto del acoso pondremos la tecnología de nuestra parte”, sentenció.
SIN CONTROL
Por estos días, una de las tareas del gremio es “perseguir” a los empresarios golondrina que dejaron el departamento dejando diversas deudas con sus funcionarios. Mencionó, por ejemplo, que un grupo de trabajadores fue embaucado por una empresa que llegó a ser contratada por la Intendencia.
Herrera entiende que los organismos públicos deberían tener en cuenta las condiciones en que trabajan los funcionarios de las empresas que contratan y, por lo menos, verificar que todas estén en regla. Cree, además, que los organismos del Estado deberían emitir certificados de habilitación para las empresas de seguridad privada.
“Frecuentemente vemos guardias que están en la calle con uniformes y muchos no tienen ni cursos y llevan un año y medio en las empresas”, lamentó.
Si bien hasta el momento han tenido conversaciones informales en la Jefatura de Policía de Maldonado, para solicitar que se apliquen controles al sector privado, Herrera sostiene que las tratativas han fracasado. “No hay control ninguno. Nos dicen que no se hacen inspecciones si no existe una denuncia escrita desde Montevideo”, argumentó.
Por eso ahora pretenden reunirse con el jefe del Estado Mayor de la policía departamental, Víctor Iraola, quien sería el nexo con el Renaemse. “El Renaemse deja que todas las empresas fantasmas trabajen diciembre, enero y febrero y luego se vayan, dejando a los trabajadores en la calle”, cuestionó la dirigente.