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“A diario recibo gente que viene por infracciones que hemos puesto y a mi me parece que es una enormidad; yo firmo 60, 70, 80 infracciones por día, lo que demuestra que el cuerpo de inspectores está en la calle y constata infracciones”, dijo Madeiro. Agregó que se retienen entre 30 y 40 motos por semana porque quienes las conducen cometen infracciones a la normativa vigente.

Agregó que “es real que si tuviéramos más personal, si hubiera más gente desplegada constataríamos más infracciones, pero hay que tener en cuenta que si en vez de tener la cantidad de policías que tenemos, tuviéramos el doble, ¿podríamos pensar que no habría robos?; creo que no”, reflexionó.

Madeiro reveló que la Junta Departamental de Maldonado está preparando una regulación para la circulación de los deliverys. Dijo que la normativa nueva procurará establecer límites estrictos para la circulación de los motociclistas que distribuyen alimentos, y otros bienes, cuyo trabajo se caracteriza por la prontitud de la entrega. Manifestó que la nueva normativa abarcará también la responsabilidad de los empleadores.

Sobre la función disuasoria que genera la presencia de los inspectores en las calles, Madeiro dijo que “para que los vean en todos lados tendría que tener 300 inspectores con uno parado en cada esquina”. “Maldonado ha crecido de forma exponencial con respecto a otros departamentos y, producto de ese crecimiento, sumado lo que es la zona turística, obviamente que la cantidad de inspectores que tenemos puede llegar a pasar desapercibida”, admitió.

Madeiro aseguró que el tipo de infracciones constatadas y registradas son muy diversas. Mencionó, entre muchas otras, el no uso de cinturón de seguridad, el exceso de velocidad, no respetar los carteles de Pare, pasar semáforos en luz roja, circular sin casco, no tener licencia de conducir, y ruidos molestos.

Pero aseguró que la mayor cantidad de infracciones que se detectan las cometen los motociclistas, y como muestra de ello, sostuvo que se retienen entre 30 y 40 motos por semana por esa razón.

Deslizó el razonamiento de un compañero suyo de la Intendencia referido a los ruidos molestos que generan algunas motos. Dijo que ese compañero le señalaba que, si bien los ruidos molestos alteran los nervios y la convivencia pacífica, para él contribuyen a la seguridad porque aseguran que las motos que los producen y sus conductores, son vistos con tiempo.

“No estamos focalizados al ruido molesto, no somos ni sordos, ni mudos, ni ciegos, nos percatamos igual que toda la ciudadanía” de los inconvenientes que causa, reconoció primero, pero se atajó luego, cuando se le objetó ese razonamiento en un funcionario de la Intendencia.

La entrevista, originalmente, era por la campaña “Conducción responsable en las fiestas” que la Intendencia lanzó este viernes 21 de diciembre, como un método para que la población de Maldonado, permanente y transitoria, cobre conciencia de que los problemas de tránsito tienen un origen en las costumbres de convivencia general.

“Yo no puedo pretender que alguien no conduzca alcoholizado, si yo mismo y el conjunto de la sociedad no lo hace”, filosofó Madeiro.