Uruguay registra caídas de entre 23,5% y 41,2% en su inversión en bienes de capital en el primer trimestre del año, lo que anticipa que la economía va rumbo a una contracción más drástica que la soportada actualmente, según un informe de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios, CNCS.
El documento señala que el gasto en camiones y ómnibus a nivel nacional durante el primer trimestre de 2016 fue 41,2% inferior al realizado en idéntico período del año pasado; en autos y camionetas cayó 25,2%; y en maquinaria agrícola se contrajo 23,5%.
Los tres rubros señalados son los únicos en todo el estudio, “Encuesta de Actividad Comercio y ServiciosPrimer Trimestre 2016”, realizado por el departamento de Estudios Económicos de la CNCS, que refleja un comportamiento nacional.
El resto del estudio refleja el comportamiento de ventas y consumos en el período, pero sólo refiere a cifras de Montevideo, cuya demanda, tamaño, e intereses, son bien diversos comparados con cada departamento del resto del país.
BIENES DE CAPITAL
A la caída de las ventas del 41,2% en camiones y ómnibus entre enero y marzo respecto al mismo período de 2015, se debe agregar que en el último trimestre del año pasado este rubro ya se había contraído 60,3% respecto a las transacciones concretadas entre octubre y diciembre de 2014, señala el informe.
Añade que en maquinaria agrícola la contracción de las ventas en el último trimestre del año pasado fue 42,7% inferior a la del período octubre diciembre de 2014, y la de autos y camionetas se redujo 4,6% en la misma comparación interanual.
La Economía define bienes de capital a los equipos, maquinarias, o inmuebles que cada compañía utiliza para producir y vender sus bienes o servicios. Los individuos, las organizaciones y los gobiernos utilizan los bienes de capital en la producción de otros bienes o servicios.
Estos tipos de mercancías son importantes factores económicos, ya que son la clave para desarrollar un retorno positivo en la fabricación de otros productos y materias primas.
Cuando los empresarios concluyen en sus análisis que el presente y futuro de los mercados en los que desarrolla su actividad se van a expandir demandando más bienes o servicios de los que ellos les proveen, procuran asegurar seguir el ritmo de esa demanda adelantándose a actualizar sus maquinarias y equipos. Pasa lo contrario cuando advierten malos tiempos por delante.
Que los empresarios de todo Uruguay hayan contraído sus compras de bienes de transporte, maquinaria agrícola, como lo señala el estudio de la CNCS, anticipan en términos de la Economía el anuncio de que están llegando tiempos más contractivos de la actividad, o un período directamente recesivo.
EN MONTEVIDEO
El estudio concentrado en el comportamiento por ramas de actividad de la demanda de bienes y servicios en Montevideo, advierte que “elcomienzode2016mostróunnuevoretrocesoenlaactividadcomercial,profundizándosedeestaformaelescenarionegativoqueatraviesaelsector”.
“En esta oportunidad los datos indican que la caída en los niveles de ventas en términos reales (descontado el efecto de la inflación) que se venían observando en algunos sectores en particular, se ha generalizado al resto de los rubros de comercio y servicios, considerados en el presente informe”, añade.
Apunta que “frente a este escenario complejo, los empresarios esperan para los próximos trimestres del año un crecimiento nulo o incluso en algunos casos profundización de los niveles de caídas actuales, tanto como resultado de las dificultades económicas a nivel local como a nivel regional y extra región”.
La gremial menciona entre los factores que más dificultan el momento actual de la actividad económica, a las “presiones inflacionarias en el mercado de bienes, rigidez en el funcionamiento del mercado de trabajo así como una elevada conflictividad entre trabajadores y empleadores”.
“El importante deterioro de las cuentas públicas asociado a un aumento del gasto público por encima del nivel de actividad junto con problemas de eficiencia de las principales empresas públicas”, son otros elementos que complican la actividad, continúa el trabajo.
Añade que hay un “deterioro de la competitividad de las actividades productivas no sólo por desfasajes en los precios relativos sino también por trabas al desarrollo de nueva infraestructura” en el país.
“Menores niveles de calidad del capital humano, excesivas regulaciones, aumento de la presión fiscal, aumento de las tarifas públicas, son algunos de los tantos factores que inciden en la competitividad de las empresas y en las expectativas económicas tanto de los inversores como consumidores”, completa el trabajo de la CNCS.