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En los últimos días, el periodista Lucas Silva presentó en Maldonado su libro “El caso Astesiano”, y consultado al respecto en La Página Central de la Revista de FM GENTE, aseguró que se trata de un caso que todavía sigue en desarrollo porque Fiscalía tiene nuevas líneas de investigación, muchas de las cuales aún continúan abiertas.

No obstante, remarcó que el libro no se basa únicamente en la figura de Astesiano sino que trata sobre “los rincones tradicionalmente opacos de la política y el Estado uruguayo”. “No es un libro biográfico de Astesiano sino sobre el poder que había alrededor de él”.

En esa misma línea, Silva llamó a desanclar las discusiones estrictamente partidarias que se oponen a la cuestión de fondo y se convierten en situaciones funcionales para el crimen organizado.

“Lo mejor para el crimen organizado es que se instale esa discusión de `tu Morabito contra tu Marset´.No es un tema de quién gobierne, son estructuras de poder”.

Asimismo remarcó que, en el libro aparecen muchos nombres de gente que está identificada con negocios de otros gobiernos y que justamente el problema radica en asociar los intereses ilícitos a cierto partido político.

“Seguramente hayan existido otros Astesianos en otros gobiernos porque el problema es cuando las ventanillas están demasiado abiertas”.

Por otra parte, subrayó que este caso es la “punta del iceberg” y que han existido casos paralelos de personas que aparentemente cobran para reunirse con determinados jerarcas.

“Si tal funcionario se junta con tal empresario es importante que la ciudadanía pueda saber si esa persona que tiene tantas reuniones en tal despacho después gana tales licitaciones”.

En relación a la investigación realizada para su libro, Silva explicó que su principal fuente de insumo fue el celular de Astesiano que fue incautado el día de su detención, pero que también se nutrió del trabajo llevado adelante por los colegas.

“Astesiano tenía tres teléfonos pero obtuvimos información solo de uno; de todas formas en los teléfonos celulares quedan rastros de ciertas cosas pero no de todas”.

Finalmente, afirmó que el primer objetivo del libro se basó en ordenar la abundante información existe vinculada al caso, y en atar cabos dejando la opinión personal “muy atrás”.

“También intenté buscarle un relato que sea llevadero para el lector porque son temas muy complicados de entender”.



Foto: Perfil X Lucas Silva