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Las autoridades de París ordenaron a la policía la remoción de miles de personas sin hogar de las calles de la ciudad. Según informes de la agrupación Le Revers de la Médaille, aproximadamente 12,545 individuos han sido trasladados a otros lugares desde la capital francesa en los últimos tiempos. Los albergues de emergencia están totalmente colmados por lo cual se ha dispuesto trasladar a un importante número a otras regiones de Francia.

Esta medida ha sido criticada por organizaciones benéficas, quienes denuncian que estas acciones constituyen una "limpieza social" dirigida a eliminar a personas consideradas "indeseables" antes del evento deportivo internacional.

Paul Alauzy, de Médecins du Monde, calificó el traslado de "intento de dar la mejor apariencia" durante los Juegos Olímpicos a la ciudad parisina, señalando que las soluciones temporales propuestas no abordan adecuadamente las necesidades de quienes se ven afectados.

Por otro lado, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, expresó su frustración ante la situación, indicando que el ayuntamiento ha buscado durante años soluciones para albergar a las personas en situación de calle, pero que la responsabilidad principal recae en el Gobierno central. En respuesta a las críticas, el Ministerio de Asuntos Sociales aseguró que considerará las preocupaciones planteadas y ha consultado a las organizaciones benéficas locales.

El Comité Organizador de los Juegos Olímpicos París 2024 declaró que no tiene responsabilidad sobre las políticas sociales del Gobierno.

El traslado de personas sin techo genera un intenso debate en la capital francesa, con críticas a la manera en que se aborda la situación de vulnerabilidad antes de uno de los eventos deportivos más grandes del mundo.

UN PROBLEMA SIN SOLUCIÓN

La cantidad de personas en situación de calle desbordó en los últimos años las acciones del gobierno local y nacional para encontrar una solución. Al igual que en otras grandes ciudades europeas, París vive un deterioro de su imagen y estética. La llegada de inmigrantes en forma permanente ha generado un caos en la gran metrópolis. Es fácil observar carpas con personas viviendo en su interior en plazas cercanas al centro, debajo de los puentes y en los portales de edificios, comercios o galerías.

En el caso de los puentes, debajo donde pernoctaban miles de personas en sus carpas, se han colocado enormes piedras o bloques de hormigón para evitar se puedan ubicar nuevamente. También se han colocado alambrados en algunos sitios donde se puedan alojar inmigrantes, drogadictos, gente sin techo, a pesar del operativo llevado adelante por las autoridades para "limpiar" a la ciudad sede de los Juegos Olímpicos 2024.

Además vale consignar que el río Sena tuvo una limpieza que requirió una inversión de US$ 1.500 millones para los Juegos Olímpicos. De esta manera, el agua del río de unos 700 kilómetros de largo, en su corriente que pasa por París no contamina ahora y se podrán realizar las actividades previstas en su agua en el marco de estas competencias deportivas mundiales.

La ceremonia de inauguración tendrá lugar en el río este viernes 26 de julio aunque desde el 24 ya hay programadas competiciones.






(Producción y fotos, Alexis Cadimar)

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