Recientemente habló sobre su historia de bullying y dijo que su propósito es que quienes estén viviendo una situación similar, sepan que se puede salir. “Hoy me abrazo y me emociono por lo fuerte que fui. Fui valiente a los 13 años”.
“Yo no lo contaba en casa. Me daba vergüenza decirle a mi papá que me pegaban en la escuela”, dice en una entrevista con el diario El País.
“Me pegaban en el piso. Yo me tapaba la cara -me acuerdo patente- y les miraba la cara y pensaba que el odio ya se les iba a pasar. Me decía: ‘Que se descarguen, ya se van a ir, quédate quietito, que te peguen y que se vayan’”, cuenta.
Su nombre artístico Tav lo creó “para que nadie lastimara a ese Gustavo, ese niño tan sensible que era muy fácil de derrotar”.
Su nueva personalidad, la que es conocida en la televisión uruguaya, canta, baila, actúa, cocina, desfila: hace todo.
Sin embargo, hasta hoy, conviven esas dos facetas. La introvertida y la extrovertida, la que todo lo puede y la que no. “A la hora de estar conmigo soy ese Gustavo simple de jogineta, remera y el mate”, dice.
Parte del propósito de su participación en Masterchef es lograr ser un referente para aquel niño o adolescente que esté atravesando lo mismo que él vivió.
“La gente se divierte conmigo sin importarle mi sexualidad o lo que me pongo. Celebro que el día de mañana haya un poquito más de empatía, que si alguien ve un chico raro no lo insulte; mi mensaje es que construyamos el mundo de la libertad del ser”, expresó.
“Hoy me abrazo y me emociono por lo fuerte que fui. Fui valiente a los 13 años cuando salía a la calle y decía que quería ser así. Fue una batalla ganada decir ‘soy lo que soy’”, manifestó.
Foto: El País