Facebook Twitter WhatsApp

Luzardo remarcó que es la sexta vez que el tema sale a luz en los últimos dos años, la primera durante las internas de 2009, y tiene el fin político de sembrar dudas sobre los gobiernos de izquierda. Confesó, además, que las denuncias que esta vez lanzó el edil Diego Echeverría sobre sus presuntos vínculos con los promotores del Selenza Village en Manantiales, le causan “un enorme disgusto personal y familiar”.

A su juicio, todos los que en estos años hablaron del tema, “podrían haber seguido el camino que puede seguir cualquier ciudadano, que es llevar la documentación a la Justicia y hacer la denuncia si entiende que existe alguna irregularidad”.

“Lo que se genera siempre es la duda, se trata de generar una incógnita sobre la persona pero sin lugar a dudas se está apuntando al gobierno departamental, porque no creo ser objetivo de nadie”, consideró.

INFORMES INTERNOS

La agrupación de Luzardo, Asamblea Uruguay, resolvió reunirse este jueves con la bancada oficialista para informar a los ediles sobre el caso. El jerarca anunció que luego hará un “detalle pormenorizado” del proceso de compra-venta del terreno que vendió en 2007 y además planteará “algunas cosas que se dicen realmente apartadas de la realidad”.

Ayer se reunió con sus abogados y en esta jornada analizarán “cómo se le pone punto final a este tema”. “Si no, estaremos cinco años en el tapete”, lamentó. En principio, dijo que aguardará a que alguno de los actores judiciales a quienes el edil Echeverría pidió enviar copia de sus palabras en la última sesión de la Junta tome el caso de oficio.

“Estoy juntando documentación e inclusive las declaraciones juradas para que la Justicia laude el tema, si entiende pertinente investigarlo”, afirmó. A su juicio, bastará con que los investigadores recurran al expediente del Selenza Village para comprobar que él no es agrimensor de la empresa, como sostiene el Partido Nacional.

Si bien aclaró que no profundizará en el tema hasta no hablar con la bancada, enfatizó que esto lesiona a su familia. Recordó que en el período pasado “no quedó director que no pasara por los juzgados y lo peor de esto es que después que te manchan y nadie pide disculpas”, como ocurrió con Satenil. “El caso se archivó y no vi a nadie que fuera a una radio a pedir disculpas. Y aquí ni siquiera hay denuncia”, cuestionó.

“Estoy bastante dolido. Más allá de los objetivos políticos que puedan estar persiguiendo, genera dificultades importantes en el entorno familiar. Quizás sea el precio que hay que pagar por estar en la actividad política”, reflexionó Luzardo, quien cree que en los próximos años la oposición golpeará a cada jerarca con posibilidades de ser candidato por el Frente Amplio en las próximas elecciones.

DARDOS A LA IZQUIERDA

“Ahora lo que tienen con este tema es que aparecen distintos actores, actores políticos y otros actores, algunos que no se saben ni quienes son que se escudan atrás de Vecinos de Manantiales. Lo que hacen es largar calumnias, y enchastrar y generar dudas y sospechas. Si alguien tiene alguna duda, que las presente en el Juzgado, que es el ámbito donde todos nos sentimos realmente representados. Pero no, generan páginas en Internet, mandan mensajes a actores inmobiliarios y empresas generando sospechas.Sin lugar a dudas tras de eso hay toda una estructura que habría que preguntarle qué intereses persiguen.”

“Está claro que no es Álvaro Luzardo el objetivo, sino el gobierno de izquierda. Estamos lejos de campaña electoral, así que imagínense lo que será todos y cada uno de los posibles que a alguien se le pueda ocurrir que puedan ser candidatos de la izquierda. Estoy lejos de ser candidato, estamos lejísimos de eso. Pero lo que sí creo es que el conjunto de los compañeros que potencialmente a alguien se le pueda ocurrir que puedan ser candidatos, van a estar en el objetivo político de algunos”, vaticinó.

Opinó, además, que “es legítimo y está bien” que alguien cuestione su gestión porque para eso ocupa un cargo político. Pero “lo que veo y me molesta es cuando se ataca a la persona y de alguna manera se ataca a la familia”, enfatizó.

En cuanto a las observaciones sobre el terreno que vendió, comentó que si hubiera sabido que la Ordenanza de la Construcción iba a cambiar, habría esperado para venderlo a un precio mucho mayor. “Pero eso no importa, el objetivo es plantear la falta de honestidad de un gobierno y en esa ola manchan a la persona, al apellido, a la familia.”