Casi dos meses después que una camioneta la atropellara cuando corría por la Rambla Williman, Melina Bentancur inició una campaña pidiendo justicia para que se establezcan responsabilidades. El incidente ocurrió el 20 de setiembre y la joven resultó con graves heridas que casi le costaron la vida y que la tienen aún sin poder caminar.
Cuando caía la tarde del 20 de setiembre, Melina Bentancur corría por el cantero central de la Rambla Claudio Williman. A la altura de la parada 37, una camioneta gris, conducida por un joven, subió al cantero, chocó contra una columna y la atropelló.
“Nunca lo vi venir y fue de frente; corría como todos los días y lo primero que me acuerdo es estar tirada en el cantero, con algo alrededor del cuello y un inspector de la Intendencia que me respondió que no me moviera y que había sido atropellada”, contó Bentancur a FM GENTE.
Lo que tenía Melina alrededor del cuello era un buzo que una doctora, que también corría en la zona, le había colocado para tapar varias heridas que la joven tenía “y una que casi me degüella”, explica.
Estuvo cerca de 20 minutos esperando la unidad de emergencia móvil rodeada de personas que se acercaron a auxiliarla y de su hermana, Leticia, y su padre, el Director General de Obras de la Intendencia, Jesús.
Del trayecto de la parada 37 al Sanatorio Cantegril recuerda flashes pero sabe que en un momento dejó de respirar y estuvieron a punto de practicarle una traqueotomía aunque reaccionó con la máscara de oxígeno y la ambulancia, que había detenido su marcha, pudo continuar el camino.
Tras arribar a la emergencia se le realizaron varias maniobras para estabilizarla y evaluar su condición y fue sometida a un estudio imagenológico para conocer la magnitud de las lesiones y, fundamentalmente, la situación de órganos vitales. La primera noticia a su familia y un grupo de amigos que estaban en el sanatorio fue alentadora: no había compromiso de vida.
Sin embargo, el panorama era complicado. Presentaba múltiples heridas en cuello, herida en el muslo derecho, fractura de mandíbula, múltiples fracturas de macizo facial, fractura expuesta con exteriorización de cúbito, fractura conminuta de epífisis radial, fractura de calcáneo izquierdo, una mano le colgaba tras el corte de dos tendones y contusión pulmonar, entre otras.
Estuvo 43 días internada, aunque los médicos pronosticaban que pasaría más tiempo en el Sanatorio. Hace poco que pudo volver a comer sólidos pero limitadamente por el estado de la mandíbula. “Soy fuerte”, dijo en reiteradas ocasiones durante la entrevista que FM GENTE le realizó en su casa aunque reveló que pasa por distintos estados de ánimo y que hubo días en los que se deprimió y lloró mucho.
Al iniciar la campaña de difusión de lo sucedido y en reclamo de justicia, Melina posteó, en su cuenta de Facebook, un resumen propio de las lesiones y tratamientos: “Fractura de tibia y peroné, pierna derecha. O sea: tengo una varilla de la rodilla al tobillo. El talón izquierdo hecho pedazos, se llama calcaño; el hueso me lo reconstruyeron con 8 tornillos y chapa. Mano derecha cortada a la mitad, casi total, cortando tendones. Me la reconstruyeron. Muñeca izquierda hecha añicos: me pusieron fierro y me sacaron hueso de cadera; aún no sé cómo está, tengo vendas. Pecho y cuello con cortaduras profundas varias. Operaciones complicadísimas, hasta 7 horas de block seguidas, transfusión de sangre. En fin, ¡soy un milagro!”.
La joven, secretaria de bancada del Partido Nacional en la Junta Departamental, no puede apoyar las piernas por lo que lo poco que puede movilizarse es harto complicado, recibe medicación inyectable y oral, puede abrir poco la boca y no debe hablar por mucho tiempo para no afectar la operación de mandíbula y por las múltiples fracturas que sufrió. Aún tiene yeso en la mano izquierda, casi hasta la mitad del brazo, y hace pocos días le quitaron un clavo de esa zona.
Lamenta y se muestra sorprendida porque desde la noche del accidente ni el joven que manejaba la camioneta ni sus padres la han contactado ni a ella ni a ninguno de sus familiares, “al menos para saber cómo estoy”.
Y también reclama públicamente que la justicia se expida respecto a las responsabilidades del accidente. Explicó que nadie le ha tomado declaraciones y que tuvieron que recurrir a un abogado para reunir pruebas y testigos para ver si de ese modo la fiscalía “mueve el expediente”.
“Pido que se haga lo que se tiene que hacer; nadie hace nada a propósito, fue un accidente, pero la justicia no está actuando. Si te moris o si te cortan un miembro, actúan, pero como a mí ninguna de las dos cosas me pasó, no hicieron nada”
fotos: FB
Escuche el testimonio de Bentancur: