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Guillermo Moroy (PN), el primer edil de la oposición en hacer uso de la palabra, consideró que “en estos momentos, cuando hay una crisis internacional que está afectando a todos los mercados, y dentro de todos los mercados también va a afectar a nuestro país y a nuestro departamento, creemos que estar gastando a cuenta no es una buena política. Endeudarse para pagar con los recursos que capaz vienen o capaz que no, creemos que no es una buena política”, aunque más adelante y en medio de otras consideraciones, reconoció estar a favor de algunos contenidos del documento, como el acuerdo alcanzado con el funcionariado municipal.
Pero también hubo un edil oficialista, como el caso de Daniel Fernández (originalmente electo por el sector del intendente De los Santos), que se expresó radicalmente opuesto, por ejemplo, a la inversión municipal para la construcción de la Ruta Perimetral, en convenio con el Mtop y privados. “Tenemos un montón de gurisada que inclusive hemos escuchado públicamente, y lo seguimos escuchando, que hay dos o tres generaciones que están perdidas, porque no se puede hacer nada por ellas. Pero siguen conviviendo con nosotros en los barrios, y las damos por perdidas, pero ¿qué hacemos con esa gurisada?. Nosotros creemos que hablando de prioridades, para estos seis millones de dólares había un montón de prioridades sociales, y eso (la Perimetral) no le va a cambiar la vida a Maldonado, porque aquí la gente viene buscando lo que tenemos, más la seguridad que tenemos, más la gente”.
Fernández recordó en su argumentación que nunca había estado de acuerdo con esa inversión y que había anunciado que no la votaría. “No se nos escuchó, y llega el día y seguimos estando en contra”, porque, “también podíamos haber puesto la mitad para educación y la otra mitad para vivienda, o para apoyar esos centros para jóvenes drogadictos; y esas creemos que son las prioridades para las que nosotros quisimos llegar al gobierno, y hoy que tenemos la guita, en vez de gastarlo en esto, lo gastamos en un pedazo de calle”.
Rodrigo Blas (PN) por su parte, afirmó que “nosotros seguimos pensando que es un disparate la cifra, que Maldonado debería estar mirando al mundo y ajustando sus gastos a una situación que se viene, y dando señales de constricción de gastos y de mesura”. Blas afirmó que “acá hay un apuro y una desmesura en gastar lo que se supone que se va a tener y lo que se va a pedir, llevando el gasto a 150 millones de dólares, 400 mil dólares por día, por año; es un disparate”, y alertó que acá el más perjudicado es el contribuyente que, “sigue siendo apretado en su obligación de pagar”.
Consideró que los planes y las obras, algunas necesarias y que están atrasadas, indican que la administración De los Santos está terminada, “el intendente De los Santos ha perdido la confianza de la población; ha demostrado que no tiene con su equipo la capacidad de administrar los fondos municipales, entonces cuando se está terminando la gestión y cuando no ha hecho otra cosa que licitaciones equivocadas y discutidas, darle todo esto, nos parece innecesario”.
Rúben Toledo (FA) finalmente consideró que la Ampliación Presupuestal fue aprobada con algunos aditivos, destacando que se evitó un problema “urticante” como el de la enajenación de terrenos por medio de un fideicomiso, ya que se dio lugar a una moción del PN para que el punto pase nuevamente a la Comisión de Presupuesto.
“Salió la Perimetral aunque había una propuesta que había hecho Cabildo que no contó con los votos suficientes”, señaló.
Respecto al monto de gastos previsto, Toledo explicó que “esa recaudación se distribuye, en gastos de funcionamiento, en el rubro cero que es muy importante en la intendencia de Maldonado, y en todo lo que se va a hacer en inversiones. Es la pauta de lo que es esta Adecuación Presupuestal, siempre y cuando se pueda cumplir con todo este objetivo que está planteado en este corto plazo que hay de dos años”.
Redactado: R.A.