María Virginia Giménez Merino concurrió este domingo, por la mañana, a visitar a un familiar en el establecimiento carcelario de Las Rosas; al momento de ser sometida a revisión se constató que, en sus partes íntimas, ocultaba un envoltorio con 43 gramos de pasta base. En audiencia que se realizó esta tarde fue enviada a prisión.
El caso generó sorpresa ya que Giménez Merino actuó como referente del colectivo de familiares de internos del establecimiento, fundamentalmente en reclamos realizados durante el último mes y medio.
Fuentes extraoficiales indicaron a FM GENTE, además, que Giménez fue una de las personas que se reunieron con el Director del establecimiento y le trasladaron reclamos tanto de internos como de familiares.
Tras la suspensión de las visitas por el brote de Covid-19, la cárcel retomó, el miércoles, el régimen habitual. Este domingo, pasadas las 9.30 horas Giménez Merino pretendió ingresar para visitar a su familiar, recluido en el sector C.
Durante la inspección previa, la funcionaria a cargo notó que Giménez Merino ocultaba un paquete en sus partes íntimas y la mujer, al percatarse de que había sido descubierta, optó por entregarlo. Resultó ser un envoltorio de nylon, recubierto con cinta adhesiva y que en el interior contenía sustancia blanca; tras el análisis se constató que eran 43 gramos de pasta base.
Enterada la fiscalía de turno, a cargo del Dr. Schubert Velázquez, se dispuso el traslado de Giménez Merino a declarar y, posteriormente, fue sometida a la justicia.
El Dr. Diego González, magistrado penal de 4º turno, la condenó, como autora de un delito de suministro de sustancia estupefaciente, a la pena de 4 años y 1 mes de penitenciaría.
Más allá del reproche penal, la conducta de Giménez Merino fue considerada como inapropiada, de acuerdo a fuentes consultadas por FM GENTE, ya que se trataba de una referente de familiares y porque, además, se contrapone con los reclamos que realizaba.