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La actual dirección de auditoría interna y control de gestión de la Intendencia de Maldonado se transformaría en una secretaría donde los responsables serán miembros de la oposición, designados por sus propios partidos, en caso de que el candidato de Unión y Cambio, Rodrigo Blas, resulte electo intendente en mayo próximo.

La propuesta, surgida del instituto Ideas –usina del programa de gobierno del sector nacionalista- fue presentada este lunes el plenario de la agrupación y que contó con la participación, además, del ex presidente Luis Alberto Lacalle.

“Queremos que todas las fuerzas políticas tengan acceso directo e inmediato a todo lo que se hace en la Intendencia, que las cuentas sean claras y que rápidamente la gente y la oposición tengan acceso a los contratos, precios y demás acciones que hacen a la cosa pública y que no suceda como hoy que hay que andar rogando que te pasen un dato y nadie sabe con certeza cuanto debe la Intendencia. No hay razón para que las finanzas municipales sean materia de secreto; es dinero de todos y todos deben saber cuál es la realidad”, expresó Rodrigo Blas.

En el mismo sentido anunció que trabajará con un interventor permanente del Tribunal de Cuentas dentro de la Intendencia de Maldonado de forma de aumentar el grado de control preventivo y legal del Tribunal en las cuentas departamentales.

“La Constitución impone al Tribunal de Cuentas de la República como fiscal de los gastos de las Intendencias y, tal como hizo San José durante muchísimo tiempo, queremos la presencia del mismo en la propia intendencia, de forma de evitar desvíos e ilegalidades y como forma además de publicidad de toda la actuación financiera de la administración; el manejo de los recursos de los contribuyentes es un asunto de suma responsabilidad y se debe hacer bajo el estricto marco de la ley”, remarcó.

Política de licitaciones y compras
Rodrigo Blas también explicó que pretende modificar el sistema de licitaciones públicas y compras de la Intendencia estableciendo en ellas un tope máximo de precio acorde a los precios de mercado y que sólo adjudicará obras y compras que estén por debajo del mismo.

“Es increíble que la IDM pague el metro de construcción, el metro de asfalto o una lapicera más caro que un privado. Las futuras licitaciones tendrán un precio máximo que será el que surja de los índices e indicadores privados en cada materia y la Intendencia comprará sólo por debajo o a igualdad de precio con esos indicativos” anunció.

Asimismo dijo que implementará en las licitaciones y compras el remate a la baja en cada uno de las ocasiones. “Dicho sistema, que es utilizado por ANTEL en forma frecuente, establece que una vez obtenido los precios se llama a los tres mejores oferentes para que compitan entre ellos con un ajuste a la baja de la oferta inicial; nosotros proponemos transformar esa práctica en preceptiva para los contratos de su administración” concluyó el candidato de Unión y Cambio.