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El pasado lunes fueron trasladados al Juzgado Letrado de San Carlos, el padre de la pequeña Abril, Carlos Enrique Manci Larrosa (31), y su madrastra Daniela Alicia Segovia Estala (28). En la instancia, el juez actuante les informó del cambio del auto de procesamiento de fecha 3 de julio.
Ahora, ambos resultaron procesados con prisión por un delito de homicidio especialmente agravado en calidad de autores; en el caso del padre además, “en mención bajo la modalidad de comisión por omisión”.

EL CALVARIO DE ABRIL
La pequeña Abril Manci Pintos de solamente un año y un mes, dejó de existir el pasado lunes 7 de julio, por una “falla multiorgánica”, a raíz de una “injuria encefálica” provocada por los múltiples traumatismos que experimentaba.
Abril estuvo internada en grave estado desde el jueves 26 de junio en el CTI Pediátrico del sanatorio Cantegril de Maldonado, donde ingresó en coma primario, en el que permaneció hasta dejar de existir dos semanas más tarde.
Las pericias determinaron que era sometida a un verdadero calvario desde hace al menos 4 meses; presentaba múltiples fracturas en los cuatro miembros y en su cráneo, además de quemaduras de cigarrillos y hematomas en todo el cuerpo.
Además, quedó en evidencia que la criatura padecía el denominado técnicamente, “síndrome de niño maltratado o apaleado”.
La mujer, marchó inicialmente a prisión por la comisión de un delito de violencia doméstica con agravantes en concurrencia fuera de la reiteración, con un delito de lesiones gravísimas en calidad de autora. El padre de Abril, también marchó a la cárcel como autor de un delito de violencia domestica con agravantes fuera de la reiteración, con un delito de lesiones gravísimas en la modalidad de comisión por omisión.
Desde el lunes, se le sumó el delito de homicidio especialmente agravado.
Redactado: R.A.