Un alumno del Ciclo Básico Tecnológico UTU generó varias escenas de violencia en la institución, según Fanny Obando, madre de una compañera del muchacho. Obando reclamó, en diálogo con FM Gente, respuestas de las autoridades de UTU y cuestionó las medidas que se han adoptado hasta el momento. Los padres, en tanto, están recolectando firmas para presentar ante las autoridades y se radicaron dos denuncias.
“No es que detectamos ni que nos enteramos, sino que son varias situaciones que han estado ocurriendo en este corto período (desde) que han comenzado las clases”, relató Fanny Obando.
Agregó que “es por eso que nosotros como padres, dos o tres padres, hicimos una carta dirigida al director, y lo que solicitamos es que todos los padres se contacten con nosotros para poder firmar es carta”.
SUSPENSIÓN INSUFICIENTE Y LA CARTA
Obando contó que “nosotros (algunos padres) estamos reclamándole al director, o a la adscripta, o al subdirector, o a la subdirectora, y estamos haciéndolo de a uno, entonces ellos han defendido al alumno por un tiempito con la idea de suspenderlo el mayor tiempo posible”.
“Si ellos lo suspenden el mayor tiempo posible, quiere decir que este chico va a volver, y ese chico tiene problemas psiquiátricos, está medicado, y si ha llegado a ir con arma blanca a amenazar a los compañeros, ha hecho crisis allí en la UTU en menos de un mes, quiere decir que este chiquilín no está siendo tratado”, diagnosticó y falló la señora.
Precisó de inmediato que “no está siendo medicado correctamente, o no está siendo contenido por parte de su familia correctamente”.
“Entonces, voy a leer la carta que hicimos nosotros”, dijo la señora, y la leyó. En la carta dicen que “dejamos constancia que nuestros hijos no concurrirán a clase hasta no tener las garantías necesarias de seguridad física y psicológica de ellos, ya que han tenido que presenciar tres situaciones totalmente atípicas de una institución educativa”.
“Primera situación: agresividad del alumno, ahí lo nombramos, en la cual se enfrentó a compañeros, docentes, y policía comunitaria”, siguió leyendo.
Añadió que hay una “segunda situación: amenaza del mismo alumno y muestra de un arma blanca a sus compañeros estando en clase de gimnasia”.
“Tercera situación: este martes 26 nuevamente amenaza en horario de clase en la que los alumnos no tenían profesor, no estaba la adscrita del grupo, no estaba el director”, avanzó.
Continuó la lectura: “Ante esta situación, los alumnos afectados comienzan a llamar a sus padres, hermanos, tíos, o algún familiar que los fueran a buscar por el gran miedo que tenían.Por ende pedimos la separación al alumno Fulano de Tal del grupo”.
“Ahora ahí nos dimos cuenta que no es tan solo la separación del grupo, sino que hay que retirarlo de la institución hasta que el chico se recupere”, comentó la señora, antes de completar la lectura de la carta.
Leyó: “La separación al alumno del grupo, ya que no le da garantía ni a los alumnos, ni a los profesores de concentración en los estudios, tampoco seguridad física y mental”.
“Es este un grupo de buen rendimiento y está siendo afectado, porque el grupo en sí es un grupo bueno, y ya una alumna con excelentes calificaciones fue cambiada a segundo año C, como consecuencia de esta situación, debido a que su madre exigió el cambio”, leyó.
Al final, la carta interroga al director de UTU: “¿Usted pretende que nuestros hijos dejen de estudiar, o que tengamos que cambiarlos de institución, ya que nosotros optamos por CBT por considerarla de muy buen nivel?”.
“Esperando tener respuesta a la dirección en forma rápida y concreta, saludamos atentamente, y ahí es que pedimos la firma de cada uno de los padres”, concluyó.
PEDIDO DE REUNIÓN
La señora Obando opinó que “somos bastante concretos, hace unos días pedimos una reunión de padres, yo fui una de las que pedí, quería que estuvieran las autoridades, profesores, y padres; a la reunión fuimos cuatro o cinco padres locos, nada más, unos pocos padres”.
“Los padres de este chico no fueron, yo los entiendo, porque suponían de qué se trataba la reunión, estaba tan solo la adscrita y el subdirector”, dijo.
Contó que las autoridades de UTU hicieron referencia en la reunión a cuestiones formales, como el uso de uniforme, que se usara el cuaderno para las comunicaciones docentes, que no se use gorras dentro de la institución, por ejemplo, pero sin abordar el tema del chico violento.
“Y nos dijeron si teníamos para hacer alguna pregunta; entonces, los pocos padres que estábamos allí nos quedamos mirando y el tema de este chico cuándo se va a tratar, y ahí empezamos a hacer preguntas”, declaró.
Afirmó que “el subdirector nos contestó que ellos no podían hacer nada, que hasta que no pasara algo, ellos no podían hacer nada, y que ya estaba en manos de abogados, y que la psicóloga de la institución había pedido una evaluación al chico y que se hiciera la historia clínica del chiquilín”.
Obando afirmó que ella y otro padre firmaron una denuncia policial, y que la policía lleva adelante una investigación de los hechos citando a testigos.
“Si el chico tiene derecho a estudiar, y los padres se presentan con un abogado, nuestros hijos también tienen derecho a estudiar y a estudiar tranquilos”, proclamó.
Indicó que “el director le dijo que él estaba siguiendo el protocolo, y le dio el teléfono a esa madre que fue con el abogado, de la inspección regional, que es la señora Mariela Piñeiro”.
“Es una situación muy fea por la que estoy pasando porque mi hija tiene miedo, y varios chicos también tienen miedo, y vemos que lo han suspendido parcialmente al chico y esto va a ir a largas”, completó la señora Obando, luego de contar algunos otros detalles del caso.