Facebook Twitter WhatsApp

“La depredación del monte nativo pasó desapercibida para nosotros, mientras los pobladores del lugar veían pasar los camiones con coronillas. La gran riqueza de Nueva Carrara no pasa por la cantera, pasa por el agua. Toda Nueva Carrara tiene agua en abundancia, incluso subterránea. Hay todo un medioambiente a conservar”, advirtió Fernández Chávez.

Por eso pidió que se tomen “providencias del caso” y que no se permita la forestación con eucaliptos en la zona. “La plantación porque ataca las riberas de los dos arroyos (Coronilla y Pan de Azúcar) y sabemos como consumen agua los eucaliptos”, enfatizó.

Desde hace varias semanas la actividad de una empresa forestadota tiene en vilo a los habitantes de Nueva Carrara, poblado ubicado al Noroeste de Pan de Azúcar. Además del impacto de la forestación, han advertido los riesgos de la fumigación con herbicidas que se realiza a metros del centro poblado y junto a los arroyos, para evitar que broten especies ya taladas.

(foto: Marita Fernández Chávez / por Carlos Premazzi)