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“Es toda una estrategia que estamos pensando; tenemos que ser conscientes que no podemos esperar una super temporada” turística, dijo.

Agregó que Adipe todavía no ha realizado una recomendación porque “no la hemos discutido en la agremiación; estamos levantando la información de todos los asociados para que sea algo con un consenso absoluto en cuanto a las opiniones de mantener, o de subir, o de bajar” los precios.

“Pero, bueno, como todavía falta un tramo y hay unas variantes con la moneda extranjera y con varias cosas; todavía falta mucho”, aseguró.

OCTUBRE YA NO DETERMINA
Bistiancic explicó que “la temporada no se define como otros años por lo que se alquila en octubre, como hace unas décadas; así que todo es para ir corrigiendo sobre la marcha”.

“Hay lugares que tienen diferentes realidades, como puede ser Piriápolis, o José Ignacio, o Punta Ballena, la península”, y no se puede dar una recomendación para todos, observó.

Sostuvo que “son lugares que trabajan de forma diferente, y lo que estamos buscando es cruzar todos los datos de las demandas que están habiendo ahora, de las consultas, sobre todo”.

ARGENTINA, LA INCERTIDUMBRE
Desde su experiencia, Bistiancic comentó que “ya venimos de varios años de una gran incertidumbre, sobre todo el sector inmobiliario formal, donde todos los años se viene perdiendo mercado”.

“Hoy la situación no ha mejorado para nada, me parece que el escenario que se está dando desde la Argentina, principalmente, que son mayoritariamente clientes nuestros, está en un momento complicado con el dólar blue subiendo mucho”, analizó.

Dijo que “la lectura de eso es que el peso argentino se está devaluando bastante; hacer una apreciación hoy de lo que puede pasar en la temporada” resulta muy difícil.

“Cada vez hay que esperar más sobre la marcha a ver cómo se comporta el peso argentino; si bien acá el dólar ha estado subiendo, y eso para el que tiene dólares es bueno, por el lado de los argentinos que tienen que comprar dólares aquí con pesos argentinos, no es muy favorable”, opinó.

Sobre el cumplimiento de los argentinos propietarios en Maldonado con el pago de expensas o servicios, dijo que no ha habido problemas. “No fue tan grave como se esperaba, por lo menos para las administradoras no hay grandes deudores, y bueno, siempre hay alguna dificultad o vienen menos”, aseveró.

“Se esperaba algo peor para los gastos comunes; por suerte… Inclusive pasó con el mercado de las ventas que los precios no bajaron como se esperaba pensando que el argentino iba a hacerse de dólares; y bueno, no ocurrió, los precios no han bajado lo que uno podía esperar”, admitió.

BRASIL NO PESA COMO DICEN
Bistiancic advirtió que el peso del turismo brasileño “no es tanto como el de Argentina y tampoco el número de los brasileros que vienen acá es tan grande”.

“A pesar de que las cifras oficiales los dan con un aumento muy elevado en porcentaje, en número no es tanto como se da; aparte, si bien nos ayuda muchísimo el público brasilero y lo que estamos tratando es que vengan, lo que hemos percibido por lo menos es que todavía no encuentran esa diferencia tan grande que encuentra el argentino en los costos de vida” en Uruguay, expuso.

Y dio la solución: “A veces cuando van a alquilar, si no pueden alquilar un mes, alquilan 15 días; lo que no pueden es en vez de comer un kilo de carne, comer la mitad”.

“Estamos viendo también qué pasa con Brasil, porque hace unos días fue un colega y, no digo acá en la zona fronteriza, pero para adentro también está caro, o está parecido a acá, los valores; así que el público brasilero que viene acá tiene un poder adquisitivo alto y quizá no lo sienta tanto”, estimó.

INCENTIVOS
Bistiancic dijo que “el gobierno nacional ahora puso en vigencia los nuevo beneficios para los turistas, la devolución del IVA, en los alquileres el IRPF, todo eso”. Afirmó que otras medidas reclamadas por el sector a principios de año “están en estudio”.

“Nosotros lo que reclamábamos al gobierno es hacer una promoción mucho más fuerte ya que las divisas por turismo para el Uruguay son muy, pero muy importantes, dicho mismo por el gobierno”, aprontó.

Y avanzó: “O sea, la inversión podría haber crecido en la promoción, porque si hablaban de 2.000 millones de dólares al año por turismo, bien se podía invertir, en vez de 10 millones de dólares con promociones que son un porcentaje insignificante, elevar la inversión para traer más turistas, o darle beneficios más reales, como un tipo de cambio diferente para la gente que opera en el sector formal”.

“De repente invertir 80 millones, 40 millones de dólares, que es una cifra inclusive hasta exagerada, porque se puede hacer por menos, pero de repente son cosas más reales que hacerlo a través de la tarjeta que involucra algunas cosas que la gente a veces las puede usar y a veces no”, completó.


foto: turismotop.com.uy