El secretario de la Asociación de Funcionarios Policiales de Maldonado, Julio Pereira, aseguró que hay malestar entre el personal carcelario ante la posibilidad de que aumente su carga horaria de 6 a 8 horas con la ampliación de Las Rosas. En tal caso, anunció que exigirán una compensación extra, como la que perciben funcionarios de Montevideo y zona metropolitana.
Pereira explicó que, desde el último motín, los trabajadores tenían un acuerdo de realizar seis horas por turno “como consecuencia de las lamentables condiciones de trabajo que padecen” y de la falta de una compensación por la tarea que realizan.
Pereira remarcó que los guardias penitenciarios dependientes del Instituto Nacional de Rehabilitación perciben una compensación de cerca de $ 2000, no así los funcionarios de las cárceles del interior que dependen de las Jefaturas Departamentales aunque cumplan la misma función.
El dirigente agregó que, a raíz de la transición que habrá cuando se inauguren las obras de ampliación de la cárcel de Las Rosas y el llamado a operadores carcelarios –que culminarán su capacitación a fines de octubre- se pensaba extender a ocho horas el horario, para poder cubrir los servicios en los dos módulos. “Esto estaría violando un acuerdo que se hizo, es como darle un dulce a un chico y después sacárselo, lo cual genera un malestar interno”, indicó.
Por ese motivo dijo que el sindicato planteó la situación al comando de la Jefatura de Policía y las autoridades aceptaron no aplicar las ocho horas hasta tener una respuesta del Ministerio del Interior en cuanto a la posibilidad de que los funcionarios carcelarios de Maldonado perciban una compensación.
Según Pereira, el comando planteará al Ministerio del Interior que “las partidas por compensación que se le pagan a los funcionarios en Montevideo, también se paguen en Maldonado. Y buscar mecanismos para mantener las seis horas o tener descansos extra”.
Por el momento, no ha habido respuesta sobre este punto. Pereira advirtió que si la Jefatura cambia la resolución interna por la cual prometió mantener la carga horaria de seis horas, “se declararía un pre-conflicto y habrá medidas sindicales para buscar caminos alternativos”.
Pereira sostuvo que las condiciones laborales se mantienen sin cambios desde el último motín. Reclamó, por otra parte, que las cárceles salgan de la órbita del Ministerio del Interior. “No estamos capacitados para la rehabiliación del recluso. El que detiene y lleva a la justicia al individuo no puede terminar cuidándolo en la cárcel”, reflexionó.