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Uno de los integrantes del equipo de pruebas de admisión, Marcelo Romero explicó que esta situación se inició el 11 de diciembre con la prueba de admisión, en la que había incluso público presente.

“El jurado por unanimidad, decidió que por esta oportunidad no iba a lograr pasar la prueba. A raíz de eso ocurre que la alcaldía (de Punta del Este) toma cartas en el asunto”, explicó.

Romero agregó que al momento de labrarse el acta respectiva ven irregularidades por lo cual el jurado decidió no firmarla, hasta tanto no se efectuara una consulta con un abogado.

“El Acalde (Martín Laventure) de una forma que nos llama poderosamente la atención, pide una nueva prueba de taller para ayer (lunes 27), desconociendo la primer prueba de taller que nosotros habíamos tomado”, agregó.

Por su parte el artesano involucrado, Diego Castillo se comunicó con nuestra emisora, para hacer precisiones respecto a lo sucedido.

“El motivo de la prueba de taller es para comprobar que la pieza es fidedigna y que el artesano es el que la realiza, es decir que es una artesanía”, precisó.

Castillo narró pormenorizadamente como fue el proceso de la prueba que, cumplió en unas 6 horas de trabajo en la propia Feria Artigas, ante una fuerte presión de los integrantes del jurado.

“Es una pieza de plata de 11 piedras, que hay que desarrollarla; me llevó seis horas hacerla y pasé situaciones bastante incómodas, por presiones, comentarios, de miembros del mismo jurado que pasaban por al lado mío y me avisaban que a las diez de la noche cerraba la feria”, lo que no está contemplado en el reglamento donde no se menciona el tiempo de realización de la pieza.

Diego Castillo confirmó que el jurado le dijo que “no tenía el nivel técnico” necesario, pero reclamó que en esas condiciones la pieza obviamente no iba a quedar perfecta como surge de un taller.

“Me juzgaron como persona y como orfebre, pero no me juzgaron la pieza”, agregó.

R.A.