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La actual directiva de la Cámara Empresarial de Maldonado está preparando la transición para entregar la gestión del gremio a nueva directiva, que asumirá el 26 de este mes y que presidirá el politólogo José Pereyra.

El presidente saliente, Marcelo Antonini, dijo a FM Gente que dejaran una gremial “ordenada, trabajando en conjunto con diferentes actores del departamento, totalmente saneada y con convenios beneficiosos para todos los socios”.

También consideró que las nuevas autoridades deberían hacer gestiones ante el Municipio de Maldonado, en busca de mejores precios de alquileres en los locales comerciales del centro. Aseguró que, casi todos, rondan entre los 40.000 y los 50.000 pesos.

“Es muy difícil que un empresario pueda afrontar esos precios, teniendo en cuenta los altos costos operativos que, para un comercio mediano, supera los 100.000 pesos”, señaló. “Los dueños de los locales y las autoridades se tienen que poner de acuerdo para que los locales sean pagables”, opinó.

A juicio del empresario, el Consejo de Desarrollo Departamental, las alcaldías de Maldonado y Punta del Este y también los trabajadores y los empresarios deberían unirse para buscar fórmulas de acuerdo en estos puntos.

La carga tributaria, los costos fijos de energía eléctrica y agua, los salarios que superan a los de otros departamentos del país, son parte de los desafíos empresariales del momento. Estos factores, conspiran contra la viabilidad de los emprendimientos, dijo.

“Las cosas están cambiando. El comerciante ahora tiene un presupuesto más elevado que antes. El gobierno trata de equilibrar lo que es la parte impositiva pero se ha sentido porque hemos tenido incrementos en algunos impuestos, que se reflejan en los costos operativos de una empresa”, remarcó.

A esto agregó el desconocimiento sobre la dinámica del mercado, las condiciones tributarias y legales que presenta buena parte de los nuevos emprendedores. En ese sentido, Antonini recomendó acercarse a la Cámara en busca de asesoramiento y también buscar el “padrinazgo” que ofrece la Incubadora de Empresas IDEAR, que funciona en San Carlos.

Debido a las características turísticas del departamento, el empresario entiende que es muy difícil sobrevivir en baja temporada y que son muchísimos los emprendimientos que abren por unos cuatro meses y luego cierran sus puertas. A esto sumó la alta informalidad que reina, sobre todo, en los pequeños almacenes y el rubro de jardinería, entre otros sectores de servicios.
mr