Facebook Twitter WhatsApp

La complejidad del caso de Alejandro Blasi -que casi agota el plazo de la Justicia para expedirse antes de liberar al único sospechoso- dejó en evidencia las dificultades del Poder Judicial de Maldonado para afrontar la cantidad de expedientes en materia penal. Pero también hay dificultades para atender la demanda en otros ámbitos.

“Cada juzgado penal de turno trabaja sin pausa, porque corren plazos que debe cumplir el magistrado. Jueces, funcionarios y abogados deben trabajar antes de las 48 horas para tomar una decisión sobre la suerte particular de cada personas. Algunos asuntos vienen aclarados por la Policía y no tienen mucho trámite, más allá de la declaración de cada uno de los testigos e indagados. El caso de Blasi tiene sus bemoles y toma todo el tiempo de los magistrados con su límite legal para aclarar la situación”, explicó García.

Preocupado por la situación en el ámbito penal, el Colegio de Abogados ha ido tres veces a la SCJ. En respuesta, el máximo órgano judicial creó dos juzgados: el de noveno turno y el de décimo turno. También se logró la especialización del juzgado de séptimo y noveno en laboral, que se descongestionaron porque antes tenían materia civil. Además, dos juzgados se convirtieron en juzgados civiles, materia que también es importante.

Sin embargo, aunque el de 10º turno descongestionó “un poco” a los otros juzgados sigue habiendo una intensa tarea para los funcionarios. Es que las sedes de 10º y 2º turno comparten actuarios y la oficina. Por eso es habitual que trabajan hasta altas horas de la noche.

“Hay días en que se van a las dos o a las cuatro de la mañana, habiendo comenzado a la una de la tarde. Además, las salas de recepción de declaraciones son muy pequeñas. En el nuevo juzgado hay cinco salas pero solo una es acorde a una audiencia de cuatro o cinco personas. Si se supera esa cantidad hay que estar parado, a veces, durante horas”, lamentó García.

La nueva sede es moderna pero no reúne las condiciones necesarias para albergar dos sedes penales, coinciden los actores judiciales. “Es más decorosa que la se tenía aunque las comodidades no son mejores”, confirmó García.

La situación ideal estaría dada con la construcción de un Centro de Justicia que concentre a todos los juzgados de las diferentes materias en un mismo edificio. Incluso, a la Defensoría de Oficio.

El Centro de justicia de Maldonado se va a construir donde está la cancha de Michelini y Florida. Es terreno del Poder Judicial y ya se inició el desalojo de quienes ocupan esa cancha, que será trasladada a otro punto de Maldonado.