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Protasi sostuvo que Uruguay atraviesa una situación económica “compleja” ante el estancamiento de la economía mundial, que no muestra signos de reactivación. Dijo que nuestro país se benefició con la suba de los precios de las materias primas y de los flujos de capitales hacia los mercados emergentes, pero eso “ahora se está revirtiendo. Nos quedamos sin los recursos, porque los fondos están volviendo a los países desarrollados”, explicó.

Consideró que “este es un momento crucial para achicar el gasto”, porque hay un déficit creciente y una inflación en aumento, pero estimó que el gobierno no lo va a hacer. Afirmó que “la actividad está estancada… Hay una pérdida de competitividad en todos los sectores”, apuntó. “Pero creo que los dados están echados y que el gobierno no va a achicar el gasto” porque no tiene la fuerza política ni la voluntad necesaria para hacerlo, insistió.

Señaló que otra “mala noticia” para el país puede ser la esperada baja de tasas por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos. “Sería bochornoso que no lo hiciera”, consideró. De todas formas, señaló que los mercados ya han ido absorbiendo esta posible medida, con una suba de tasas y el aumento de dólar.

En cambio, centró su preocupación por la situación en Brasil. El extitular de la autoridad monetaria dijo el país norteño vive una situación “muy incierta, y no podemos decir que vaya a salir en un par de años”. Incluso apuntó que el ajuste fiscal anunciado podría posponerse por el juicio político contra la presidente Dilma Rousseff. “Eso nos va a pegar”, vaticinó.

Indicó que, por tanto, “Uruguay está en el preámbulo de una eventual y posible baja de la calificación” por parte de los mercados financieros internacionales. “En la mediad que Brasil se deteriore más, Uruguay no va a poder zafar”, vaticinó. Y añadió que se está viviendo la misma situación que cuando Brasil, en 1999, devaluó su moneda un 50%.
Por otra parte, Protasi dijo que no espera “buenas noticias” de Argentina si el gobierno de Mauricio Macri realiza la anunciada “devaluación real” y unifica el tipo de cambio, como se espera. Dijo que esto impactará en nuestro país en el corto plazo, aunque será beneficioso luego, a mediano plazo.

“No tengo claro cómo va a ser la temporada esta, del turismo”, precisó. Y dijo que el comercio, si se llegara a aplicarse una devaluación en Argentina, va sentir “un impacto” en la demanda, que no va a ser beneficiosa en lo inmediato.

“Cuando argentina ajusta, no tenemos más remedio que ir atrás… Es insoportable competir con Argentina y Brasil a la vez”, subrayó. “Yo creo que Uruguay no va poder dejar de de ajustar el tiempo de cambio en términos reales en la medida que Argentina lo haga”, resaltó.